El eventual ingreso de Venezuela al Mercosur como miembro pleno, a fines de este año, suena más a una declaración política que a una realidad. A las enormes dificultades que tendrá Venezuela para adecuarse al arancel externo común, se suman las reticencias de Brasil, que teme que la incorporación de ese país siga demorando el acuerdo comercial macro entre el Mercosur y la UE. Conviene estudiar las características del sector agrario de Venezuela, uno de los países latinoamericanos donde la agricultura tiene menor incidencia (5%) en el PBI. El país tiene cerca de 20 M de has disponibles para incorporar a la agricultura, y existe un plan nacional orientado hacia ese objetivo, pero hasta ahora resultó ser más retórico que real. Este país petrolero (el 30% del PBI y el 80% de las exportaciones provienen del “oro negro”), de 25 M de habitantes, importará este año casi 1,5 M/t de trigo, 500.000 t de maíz y 150.000 t de arroz. La nueva Constitución venezolana califica como “contraria a los intereses sociales” a toda propiedad privada de más de 5.000 has. ” Se acaba el latifundio o yo muero en el camino”, dijo Chávez desde un estudio de televisión montado en una hacienda expropiada. Luego siguió el anuncio de la confiscación de 5.000 has de o-tras estancias, presagia una radicalización del proceso distributivo.
Sebastián Masana. Especial para Infocampo