Argentina mantiene, por séptimo año consecutivo, el máximo reconocimiento del estatus sanitario respecto a la encefalopatía espongiforme bovina (EEB), -popularmente conocida como enfermedad de vaca loca– otorgado por el Comité de Evaluación de la Inocuidad Alimentaria en del Organismo de Normas Alimentarias de Australia y Nueva Zelanda.
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Este reconocimiento sanitario, que se obtuvo por primera vez en el año 2015, contribuye a mantener y fortalecer los compromisos y acuerdos comerciales vigentes de mercancías de origen rumiante que la Argentina tiene establecidos con terceros países.
Esta óptima condición se obtiene como consecuencia de nunca haberse detectado la enfermedad en el territorio nacional y por las acciones de control y vigilancia que lleva adelante el Senasa para sostener el estatus logrado y contribuir a preservar la salud pública.