Justo, a un par de meses de la cosecha de trigo, expertos agroalimentario del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) desarrollaron un patrón de referencia certificada para la producción de harina.
Esta herramienta, la definen desde el INTI, es fundamental para el control de procesos y productos no sólo en molinos, sino también en materias primas de industrias de segunda transformación como panificados, galletitas, pastas frescas y secas.
“El trabajo busca promover y dar soporte a la producción nacional de modo de satisfacer estándares internacionales y mejorar el perfil exportador del país. Gracias a este avance, en este momento del año, los laboratorios deben contar con métodos validados y verificados”, dice Ramiro Blasco, Ramiro Blasco del Departamento de Producción de Materiales de Referencia de la subgerencia de Metrología Científica e Industrial del INTI.
La nueva herramienta es una llave para la exportación, el ajuste de procesos y su control industrial.
PATRÓN INTI – MRC 017 – 001
Este patrón, único en la región, incluye parámetros vinculados al comportamiento reológico (deformación de los materiales en respuesta a la aplicación de una fuerza, como puede ser el amasado) que es clave para establecer su aptitud industrial.
Las mediciones para la caracterización siguieron el esquema de la Norma ISO 17034 y para esto se seleccionaron una red de laboratorios competentes, elegidos por el INTI.
Entonces, el nuevo patrón incluye parámetros certificados como humedad, cenizas a 910°C, número de caída (“falling number”) y gluten húmedo.
También otros datos informativos como nitrógeno, cenizas a 550°C, gluten (seco, húmedo y seco con solución salina), absorción farinográfica, índice de elasticidad e hinchamiento, siendo referenciales los parámetros de grasa total y el resto de los parámetros reológicos.