En la jornada del miércoles en el mercado de Chicago, el dato destacado fue la fuerte recuperación del precio del trigo, que ganó U$S 11,39 la tonelada para la posición julio, y volvió a orillar los U$S 400 (U$S 395,55).
Uno de los principales factores destacados por expertos del mercado de granos fue la posibilidad de que India restrinja sus exportaciones del cereal, debido a que está sufriendo una ola de calor histórica que cortaría con una racha de cinco cosechas récord consecutivas.
Según la consultora Granar, el Gobierno indio redujo de 111,3 a 105 millones de toneladas su estimación de producción en 2022.
Algo similar opinó el analista Esteban Moscariello. “La gran historia en la sesión fue la noticia de India de que sus exportaciones de trigo pueden verse restringidas debido a una pérdida de producción”, resumió.
Si la producción de trigo de la India cae por debajo de los 100 Mt, la India pasaría de ser un exportador de trigo a ser un importador.
— Esteban Moscariello (@moscarielloe) May 4, 2022
Granar amplió que el rumor fue desmentido por las autoridades indias, que descartaron la posibilidad de que el país imponga restricciones a las ventas externas de trigo por contar con existencias suficientes como para asimilar una menor cosecha.
No obstante, “las versiones que corrieron entre los operadores dejaron el tema instalado y bastaron para que los especuladores pasaran de liquidar a comprar contratos de trigo, en un contexto de restricciones en la oferta que podrían extenderse a la campaña 2022/23 por la crisis bélica en la zona del Mar Negro y por el muy mal estado actual de los trigos de invierno en Estados Unidos, que son los que aportan poco más del 70% de la oferta total del grano fino en ese país”, completó Granar.
SOJA
En lo que respecta a la oleaginosa, recuperó U$S 3,67 tras las bajas del martes y volvió a ubicarse por encima de los U$S 600 la tonelada (U$S 602,78).
Fue fundamental el repunte del aceite (sumó US$ 47,40 y quedó con un ajuste de US$ 1817,24), en medio de un contexto de oferta limitada de aceites vegetales por la continuidad de la guerra en Ucrania y por la prohibición de las exportaciones desde Indonesia, situaciones que impactan sobre los aceites de girasol y de palma, respectivamente.
Sin embargo, la caída de la harina (julio perdió US$ 6,28 y quedó con un ajuste de US$ 460,98) y la ausencia de la demanda china limitaron las subas.
En tanto, se confirmó la suba de medio punto en las tasas de interés, un movimiento que estuvo en línea con la expectativa mayoritaria de los operadores y que además se conoció sobre el cierre de los negocios en Chicago, “por lo que habrá que esperar para ver si tiene algún impacto sobre el movimiento de los especuladores o si el hecho de que el dato resultara el esperado deja todo sin variantes”, indicó Granar.
MAÍZ
El cereal de verano, en tanto, tuvo una rueda volátil que acabó con un muy leve repunte de U$S 0,49, para dejar el precio de la tonelada en U$S 312,68.
Como datos alcistas siguieron repercutiendo la fuerte demora en las siembras estadounidenses, la caída que tendrá el área cubierta con el cereal en Ucrania, que se prevé próxima al 30% por la continuidad de la guerra, y la falta de humedad en el centro-oeste de Brasil, que ya estaría afectando los cultivos de la segunda cosecha.
“Los fundamentos propios del mercado agrícola dan lugar a pensar en un andar firme de los precios del maíz en particular. Además, la posibilidad de que la Reserva Federal de EE.UU. sorprendiera con una suba mayor al medio punto no se dio y, quizás, eso deje cierto sabor a poco entre los especuladores”, opinó Granar.