El ministro de trabajo Jorge Triaca se reunió con Mariana Vassalli, actual titular de la fábrica de cosechadoras homónima, para interiorizarse de la delicada situación financiera que atraviesa la empresa de la localidad santafesina de Firmat.
El complicado contexto de la firma amenaza con afectar a los más de 600 puestos de trabajos directos, a su vez, en toda la economía de la región. Impactada por la caída del convenio con Venezuela, que suspendió las órdenes de compra y los pagos de las máquinas que ya fueron entregadas, la empresa viene haciendo frente desde hace un año y medio al parate productivo.
“Nos estamos descapitalizando para sostenernos, no queremos dejar a la gente en la calle pero así no podemos aguantar mucho más” describieron los gerentes al ministro Triaca, según pudo saber el portal La Política Online.
Vassalli había firmado convenios con Venezuela en el 2005, en el marco de los acuerdos que impulsó el kirchnerismo con el país caribeño, para la fabricación de 700 cosechadoras. Tras la caída del acuerdo, a Vassalli le quedó un stock de máquinas por u$s18 millones y compromisos crediticios con el Banco Nación, que financió a la firma para llevar adelante el proyecto comercial que incluía una hipoteca de primer grado sobre una de las tres plantas de Firmat.
Como a su vez, por su diseño, las cosechadoras fabricadas para Venezuela no son compatibles en el mercado interno, la fabricante debió buscar mercados alternativos como Perú. Pero los titulares dijeron a Triaca que no hay tiempo para concretar nuevos acuerdos yu que necesitan “una salida urgente”.
El de Vassalli es un caso similar al que le ocurrió a la avícola Cresta Roja, que también se vió afectada por los maltrechos acuerdos con Venezuela.
Ahora, la empresa de Santa Fe redujo la jornada laboral a cuatro horas, aunque abona la totalidad de convenio, y a su vez, goza de crédito fiscal por más de diez millones de dólares: “Compramos con IVA al 21% y vendemos al 10,5. Tenemos más de u$s10 millones a favor que no nos reconocieron nunca”.
“Tenemos capital, empleados e infraestructura para producir, pero una deuda muy grande con el Banco Nación” describieron en la reunión con funcionarios nacionales. “Hoy hay muchas expectativas en el campo, hay un dólar más competitivo y se espera una buena cosecha para marzo, son condiciones que impactarán positivamente en la empresa pero que hay que ayudarla porque hoy no cuentan con insumos ni capital financiero para reactivar la producción” explicó el diputado del PRO por Santa Fe, Lucas Incicco, a La Política Online.
Incicco se interiorizó de la situación a partir de la información que suministró Miguel Carrara, abogado de la firma e integrante del grupo Abogados PRO quienes ganaron la presidencia del Colegio con la lista del Dr. Hernán Racciatti. Por tal motivo, el diputado santafesino fue uno de los impulsores de la reunión entre representantes de la firma y el ministro de trabajo Jorge Triaca y el ex Techint, Miguel Puente. “Más que darle una mano a una empresa significa salvar a toda la localidad”, consideró Incicco .
Desde el Ministerio de Trabajo le solicitaron a la empresa un informe detallado, cuantitativo, sobre la situación que atraviesa y a partir de allí se comprometieron a abrir canales de diálogo con distintas áreas del gobierno federal para diseñar un plan de salvataje a la firma.