Luis Alberto Salines es el responsable del programa de mejoramiento de soja, del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria.
Desde la sede de Marcos Juárez (Córdoba), el profesional anticipó que en aproximadamente un mes se inaugurará un nuevo edificio que contendrá un banco de germoplasma de soja, que contendrá una mayor cantidad de materiales que el actual, gracias a un convenio de vinculación tecnológica cerrado con Acsoja, la asociación de la cadena de valor de esta oleaginosa.
-¿Cómo es esto del banco de germoplasma?
-El Inta ya tenía uno acá en Marcos Juárez, pero con este convenio lo que hace la institución en poner un nuevo edificio e incrementar la colección, gracias al aporte que harán los criaderos de sus colecciones. Hasta ahora el banco tenía una cantidad de limitada de entradas. La idea es contar con un único banco a nivel nacional, de mayor escala.
-¿Cómo son los tiempos?
-El edificio ya está listo y las cámaras instaladas. También se ha presupuestado para la parte del equipo de gente que va a trabajar en el banco. La idea es que en semanas esté funcionando, al menos en la captura de los materiales de las empresas, ya que hay llevará un tiempo largo clasificar por grupo y pureza.
-¿Qué guarda un banco?
-Lo que se designa como germoplasma son variedades que ya han dejado de tener propiedad. También se guardan líneas inéditas. Todo esto es útil en la medida que se realiza la caracterización del material, por ejemplo, comportamiento frente a enfermedades.
En este sentido, el Inta cuenta con metodologías para hacerlo, como a roya donde el screening se realiza en Cerro Azul. También se está pensando en la caracterización molecular de los materiales.
-¿Cuántos germoplasma calcula que va a tener el banco?
-Dentro de la parte oficial hay unas 600 a 700 entradas en este momento. Creemos que con la incorporación de los germoplasmas que tienen los privados deberíamos llegar a unas 3.000 o 4.000 entradas. Pero, repito, que de eso hay que hacer una clasificación porque puede haber superposiciones de los materiales de distintos criaderos.
-¿Cómo va a ser el banco argentino respecto del de otros países productores de soja?
-Brasil tiene un banco muy grande y caracterizado, y ni hablar de los EE.UU. En la Argentina veníamos medio atrasados pero con este acuerdo con Acsoja vamos a comenzar un trabajo que estos países ya vienen haciendo. Hoy, un banco de germoplasma es un recurso estratégico para un país productor y que hace mejoramiento como el nuestro.
-¿Qué se guarda en un banco?
-Las semillas se guardan al vacío y a una temperatura de 5C. Pero en estos bancos, que se denominan “activos”, cada dos o tres años se tiene que hacer una renovación del material. Pero hay bancos “de largo plazo” como en Castelar, donde en otras condiciones ambientes la semilla se conserva más.
-¿Qué quiere decir renovar?
-Se toman semillas de la variedad, se las siembra, se purifica, se la cosecha y se la vuelve a guardar nuevamente.
Banco, pero libre de OMG
Aparentemente, el banco de germoplasma no podrá contar con materiales transgénicos, por ejemplo aquellos que contengan el
gen de resistencia a glifosato. Rodolfo Rossi, presidente de Acsoja, explicó que un consejo mixto gestionará el banco, que será de libre disponibilidad, pero que no tendrá materiales transgénicos.
Al parecer, tampoco las empresas pondrán a disposición todos sus materiales, sino aquellos que denominan como “públicos”.
En diálogo con Infocampo, Rossi reconoció que los regímenes de propiedad intelectual han actuado como freno al intercambio global de germoplasma.