El cierre semanal de los mercados en Chicago marcó un balance en rojo para los tres principales granos: soja, maíz y trigo.
En el caso de la oleaginosa, este viernes finalizó con una pérdida de U$S 13 en el contrato a mayo, hasta posicionarse en U$S 581,86, un 7,5% o casi U$S 47 por debajo de la apertura del lunes, que fue a U$S 628,41.
El principal motivo del descenso del poroto estuvo relacionado al informe sobre perspectiva de siembras 2022/23 en Estados Unidos publicado por el USDA, en el que pronosticó una siembra récord de soja, con 36,83 millones de hectáreas, por encima de los 35,91 millones pronosticados por los privados y de los 35,29 millones de hectáreas de la campaña 2021/22.
[Economía]
Según informe del @USDA , el área sembrada de soja🌱 en 🇺🇸 superaría a la de maíz 🌽 por primera vez en cuatro años.
Ver informe: https://t.co/OSO6pa2hXE pic.twitter.com/d1FdNg5UFz
— Bolsa de Cereales de Córdoba (@BCCBA) March 31, 2022
“Si con lo sembrado en el ciclo anterior EE.UU. logró una cosecha récord de 120,71 millones de toneladas, todo da para esperar que, con un clima relativamente normal, la nueva campaña aporte una nueva marca máxima, algo que no sería compatible con el actual nivel de precios de la oleaginosa, que sigue entre los más altos históricos”, repasó la consultora Granar.
Además, esto se da cuando sigue ingresando en el circuito comercial la oferta de Brasil y cuando comienza la recolección en la Argentina, a la vez que se suma con influencia bajista el Covid en China, que mantiene a millones de personas en aislamiento y que ralentiza el movimiento económico del principal demandante de la oleaginosa.
Trigo
El cereal de invierno, que es el que más viene sufriendo la volatilidad, acabó la semana en U$S 361,74 en Chicago, más de U$S 40 o 10,7% por debajo del arranque del lunes (U$S 405,01, siempre en la posición mayo).
En este caso, el USDA había sido alcista, previendo una siembra menor a las expectativas y existencias también inferiores a las previstas. Por eso, hasta la media rueda del viernes, venía subiendo.
Sin embargo, más tarde se impuso el hecho bajista de que Rusia está logrando reactivar sus exportaciones pese a la continuidad de la guerra en Ucrania, lo que le resta demanda al resto de los proveedores.
Según reportó Granar, la consultora rusa SovEcon elevó de 33,50 a 33,90 millones de toneladas su previsión sobre las exportaciones de trigo de Rusia, frente a los 32 millones previstos por el USDA.
“El pronóstico de exportación ha aumentado en medio de los altos precios mundiales, la debilidad del rublo y los rápidos envíos en la segunda quincena de marzo. Un factor adicional es que parte de la demanda de trigo tuvo que pasar de Ucrania a Rusia, dado que las terminales ucranianas no están operativas debido a la guerra”, dijo la firma.
Maíz
El cereal de verano, por su parte, también se sumó a la tónica bajista, pero siempre bajo un escenario más estable: se ubicó este viernes en U$S 289,36, solo U$S 7 o 2,5% por debajo del lunes.
En este caso, además, hubo subas en los contratos correspondientes a la próxima campaña (diciembre subió U$S 1,67 y quedó con un ajuste de U$S 270,85 por tonelada), de manera de comprimir la brecha existente entre los dos ciclos comerciales, con un nivel de valores que hoy sigue entre los más altos históricos.
“Todo se mantuvo relacionado con lo publicado ayer por el USDA en su trabajo sobre perspectiva de siembras, dado que proyectó la superficie destinada al maíz estadounidense 2022/23 en 36,22 millones de hectáreas, por debajo de los 37,23 millones calculados por los operadores y previstos por el organismo en su Foro Anual, y de los 37,78 millones cubiertos en la campaña 2021/2022”, explicó Granar.