Los fanáticos de la jardinería en sus compras en los supermercados siempre tienen una parada obligada en la sección donde venden las hierbas en macetas chiquitas, pero suele aparecer el mismo problema después de una semana de haberlas comprado: se mueren.
Al momento adquirir estas plantas se tienen que tener en cuenta seis cuidados para mantenerlas vivas y poder lograr que se usen durante años.
Los seis pasos para el cuidado
- Reconocer qué plantas están en mejor estado: hay que asegurarse de elegir las que estén en mejor estado. En principio, fijándose que las hojas tengan un verde vibrante, que estén libres de manchas y no tengan flores, ya que se encuentran en el final del ciclo de vida.
- Una vez elegidas, ponerlas en una nueva maceta: las macetas que se venden en los supermercados están pensadas para cultivar y usarlas rápidamente. Si no se la transporta a una maceta nueva con tierra fresca no sobrevivirá mucho tiempo porque las raíces vienen atadas y luchan por sobrevivir en una maceta chiquita. De esa misma planta es posible que se puedan distribuir en diferentes lugares para que cada planta tenga más nutrientes y luz, con un buen drenaje para el exceso del agua que pueda salir del fondo.
- Regar con regularidad: las raíces de este tipo de hierbas vienen desnudas, es decir, que estas están acostumbradas a estar siempre sumergidas en el agua, por eso cuando se ponen directo en el suelo pueden morir rápidamente. Para lograr una transición a la maceta más fácil hay que regalarla todos los días o cada dos días durante las primeras semanas, aunque la tierra este húmeda del día anterior.
- Abonarlas: cuando las hierbas recién llegan del supermercado necesitan un shock de nutrientes, por eso es buena idea abonarlas. Una semana después de haberla trasplantado, tiempo considerable para que se adapte a su entorno, hay que añadir un regimiento de fertilizantes. Los métodos que se pueden elegir son desde un abono orgánico hasta una pulverización foliar cada pocos meses.
- Encontrar un sol o iluminación adecuada: este es el factor más importante para mantenerlas vivas. Hay que buscar las necesidades lumínicas específicas a la hierba, se puede usar luz natural o probar con un aparato de luces de cultivo, que vienen en diferentes tamaños.
- Podarlas regularmente: estas plantas logran altos beneficios con una poda regular para evitar que las hierbas florezcan y mueran rápidamente. Se deben recortar los botones florales cada vez que aparezcan para que siga creciendo.