Según un informe de Ecolatina, el menor crecimiento de la economía brasileña amenaza con reducir el impulso de las exportaciones argentinas al país vecino. La consultora advirtió que por cada punto en que se reduce el crecimiento de Brasil, las ventas nacionales a ese mercado disminuyen en 222 millones de dólares.
A pesar de que las exportaciones de nuestro país crecieron un 15,4 por ciento en lo que va del año respecto a igual período de 2004, las importaciones de productos brasileños se incrementaron a un ritmo mucho mayor, lo que acentúa el saldo negativo en la balanza comercial.
Las proyecciones aseguran que la mala performance del sector agropecuario en el país vecino redujo las exportaciones argentinas de abonos, herbicidas, funguicidas y fertilizantes en más de 220 millones de dólares en comparación con el primer semestre del año pasado. Algo similar habría ocurrido con algunos materiales para la construcción, cueros, cereales, harinas, y grasas.
Sin embargo, Marcelo Elizondo, director de la fundación Exportar, desestimó el informe privado y afirmó que el comercio con Brasil seguirá en pleno crecimiento y que tanto las manufacturas industrial y agropecuarias seguirán teniendo una gran importancia para su desarrollo económico.
Remarcó además que teniendo el superavit primario del 5% del PBI, el país está blindado a los efectos de algún impacto económico que impida la compra de bienes y servicios al exterior.
Por otra parte, según la consultora especializada Oil World, el área sembrada con soja en Brasil se reduciría en entre 400 y 500 mil hectáreas. Ese achicamiento, dicen en el mercado local, podría inducir a las fábricas de maquinarias del país vecino a direccionar sus ventas hacia el mercado argentino.
