El domingo 7 de octubre se lanzó SAOCOM 1A, el satélite argentino que tendrá importante prestaciones para el Agro. A diez días de su lanzamiento, Laura Frulla, investigadora principal de la misión dió detalles del proyecto e informó que ya encendió el instrumento principal del satélite y todo funciona según lo esperado.
Laura Frulla, es Doctora en Física de la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad de Buenos Aires y se especializó en correcciones atmosféricas en bandas ópticas, formación que le permitió coordinar la misión del SAOCOM y la convirtió en vocera del proyecto.
En dialogo con Juan Pablo Varsky, conductor del programa No somos nadie que se emite por radio metro 95.1, Frulla señaló que “El SAOCOM nace a partir de la necesidad de los usuarios” y detalló que en el marco de reuniones con otros profesionales “surgió la necesidad de dar soporte a la agricultura y a la hidrología” así fue que desdieron hacer un instrumento que opere en la banda de las microondas del espectro electromagnético. Esta característica es la que le permite al SAOCOM 1A estimar la humedad del suelo hasta 2 metros de profundidad y a partir de esa información crear alertas tempranas de inundaciones, como así también gestionar el uso de agroquímicos, ej fertilizantes.
En ese sentido, la especialista indicó que parte del proyecto fue costeado con un préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo-BID, el cual consideró que sólo con las prestaciones para la agricultura y la hidrología, la misión estaba cubierta.
“Una vez que nosotros identificamos que es lo que hay que hacer, traducimos lo que pide el usuario a requerimientos y se lo comunicamos a los ingenieros que son los que tiene que construir el satélite. Ese es el trabajo de mi equipo” indicó la investigadora respecto a sus funciones.
Por su parte Varsky, consultó a Frulla sobre la existencia de etapas del proyecto donde los responsables de la construcción le pudieran haber manifestado que lo que ella solicitaba era imposible de construir. La especialista señaló, a modo anecdótico, que el diseño original de SAOCOM 1A tenía una antena de 20m2, pero para cubrir las prestaciones tuvieron que extenderlo a 35m2. Según la investigadora, esa etapa fue una de las más criticas, pero haciendo referencia a su característica de no aceptar un no como respuesta, señaló que pudieron atravesar los obstáculos que se presentaron.
Luego del exitoso lanzamiento, Frulla indicó que comenzó la etapa de operación del Satélite: “no podemos creer lo bien que está todo, funciona una pinturita” señaló la especialista.
