Este incremento del área dedicada al cultivo permitirá revertir la pronunciada caída en la producción de algodón, atribuida por los pequeños y medianos agricultores santiagueños a la “baja rentabilidad” del cultivo y se reemplazo por la soja, a lo que se sumó en la última cosecha la pérdida de más de 5 mil hectáreas por condiciones climáticas adversas.
Pese a esta pérdida, la superficie cultivada con algodón en la campaña 2005/06 fue de alrededor de 60 mil hectáreas, un 30 por ciento más con relación a la producción del período anterior, aunque notablemente inferior a las 200 mil hectáreas sembradas en el período 1996/97.
Según un informe de la Sociedad Rural Argentina, “las intenciones de siembra para la campaña 2006/07 rondan las 400.000 a 430.000 hectáreas lo que de concretarse recuperaría el nivel de producción de 2004/05”.