En marzo, funcionarios del Mercado de Futuros de Dalián, China, visitarán la Bolsa de Comercio de Rosario. No será el primer contacto que tendrán directivos del organismo asiático con los argentinos y el objetivo primordial es poder elaborar las herramientas que permitan establecer precios de referencia para la soja sudamericana.
“Con la Bolsa de Dalián estamos cultivando la relación porque, como hemos aprendido de los avances con los chinos, estas cosas llevan tiempo y paciencia”, explicó en una conferencia con periodistas el flamante presidente de la Bolsa de Comercio de Rosario, Jorge Weskamp.
Funcionarios de la Bolsa de Rosario visitaron el Mercado de Futuros de Dalián hace dos años porque consideraron que era indispensable establecer contacto con un país interviniente en la industria de futuros y opciones relevante y que tiene como producto básico el mismo que la Bolsa rosarina opera en volumen físico.
“Ellos tienen una cotización de soja para el mercado interno y luego lanzaron un producto para la soja de importación, fundamentalmente la transgénica”, explicó Weskamp.
Quien llevará adelante los destinos de la Bolsa rosarina por los próximos dos años, enumera las coincidencias que tienen ambas entidades y por las cuales el acercamiento es importante: “Son fuertes importadores de soja sudamericana y tienen mercado de futuros, nosotros somos los proveedores de esa soja y tenemos mercado de futuros pero no tenemos el precio para la soja sudamericana porque nos manejamos con el precio de Chicago, que la mayoría de las veces refleja una situación desfavorable para Sudamérica”.
Protagonismo. Las operaciones en la Argentina tienen como referencia lo que ocurre en el Chicago Board of Trade (CBOT). Esto hace que muchas veces no se vea reflejada la situación de los cultivos en el hemisferio Sur.
“Lo que estamos procurando es establecer los mecanismos para producir un precio para la soja sudamericana”, explicó Weskamp.
Ya durante el presente año podría estar operativa la plataforma electrónica que se está desarrollando en conjunción con San Pablo. Luego, con tiempo, la idea es sumar a los operadores chinos.
“Lo importante es producir la herramienta adecuada para que sea utilizada por los actores, es decir, los diferentes mercados”, enfatiza el presidente de la Bolsa. Y agrega: “Si los precios de Chicago no tienen en cuenta qué es lo fundamental para Sudamérica pagan, por ejemplo, por una sobreoferta en los Estados Unidos, es decir, el precio de que no se nos tenga en cuenta”.
Acuerdos. Si bien no es un tema que golpee de lleno a los socios de la Bolsa, la modalidad de acuerdos de precios preocupa a los directivos de la institución porque “son políticas que sirven para poner paños fríos a los síntomas pero no son soluciones de fondo”.
Juan I. Martínez Dodda
jodda@infobae.com
