La Comisión Hortícola de Misiones dio a conocer una serie de medidas en el marco de la campaña de prevención que lleva adelante para prevenir el marchitamiento del tomate.
La entidad, compuesta por organismos provinciales y nacionales, alertó acerca del grave impacto de la enfermedad generada por la Ralstonia solanacearum, una bacteria que habita el suelo e ingresa a la planta por sus raíces o heridas causadas por insectos, lo que le ocasiona que el flujo de agua no llegue a las partes aéreas del vegetal. De esta forma, el cultivo manifiesta síntomas de marchitez, lo que deriva en su muerte.
El informe resaltó que por la enfermedad en Misiones se pierden grandes cantidades de tomate, así como también de pimentón, papa, berenjena, morrones y tabaco.
“Los especialistas advierten que es perjudicial durante la época de lluvias o bajo condiciones de riego, ya que es cuando el suelo se encuentra húmedo durante mucho tiempo”, indicó.
Cómo prevenir
El ingreso de la bacteria a las plantas se puede evitar a través de los métodos de solarización y desinfección de suelos de manera química con productos como el formaldehído, que resulta uno de los más eficaces.
Para avanzar, es necesario que los productores sepan si el lote no tuvo antecedentes, debido a que la bacteria puede permanecer en el suelo de 8 a 11 años. Por ello, aconsejan realizar una combinación de métodos, además de podar las plantas.
“La prevención y el manejo del cultivo es la única solución en lotes que no están infectados”, señalaron los integrantes de la Comisión, que está conformada por el Ministerio del Agro y la Producción, Vicegobernación de la provincia, el Instituto de Fomento Agropecuario e Industrial (IFAI), el INTA, la Secretaría de Agricultura Familiar local, la Secretaría de Agricultura Familiar, Coordinación y Desarrollo Territorial de la Nación , Interferias, el Mercado Central de Posadas y la Biofábrica.