Gremios que representan a aceiteros y recibidores de granos anunciaron medidas de fuerza que ya se iniciaron este lunes con movilizaciones del Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (SOEA) y que se transformarán en una huelga nacional a partir del martes con la organización de URGARA y FTCIODyARA.
El reclamo de los sindicatos es por un bono anual con un aumento del 176%, en tanto que desde la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) aseguran que se trata de una demanda “incumplible” y que si fuese atendida implicaría un endeudamiento para la industria de más de $1.000 millones para pagar el “estrafalario bono”.
“Las medidas de fuerza de los gremios afectan a todos los puertos y plantas aceiteras en el país, lo que pone en riesgo la producción para consumo interno así como la exportación clave del país (la harina de soja es el primer producto argentino de venta al exterior)”, remarcaron desde CIARA, al tiempo que reiteraron que la decisión solo “reduce los ingresos para todos y además le hacer perder a la Argentina su participación en el mercado mundial”.
Según las empresas agroexportadoras, las negociaciones paritarias con los gremios están estancadas. En ese marco, afirman que desde CIARA hubo una propuesta para ajustar los salarios por inflación vencida hasta agosto de 2021 mes a mes, además del bono anual y una parte variable adicional para aquellos que prestaron tareas efectivas durante la cuarentena obligatoria por la pandemia de Covid-19.
“La industria otorgó a comienzos de la pandemia un incremento salarial del 25% para ser revisado una vez que la inflación medida por el INDEC superara ese porcentaje. Los sindicatos aceptaron ese criterio pero cuando se abrieron las revisiones pusieron sobre la mesa nuevas demandas, con datos de inflación irreales y pedidos de bonos especiales extravagantes, superiores al 176%”, argumentan desde CIARA.
Y disparan: “El salario conformado mensual del empleado aceitero es actualmente superior a los $100 mil para los recién ingresados, considerando los adicionales más usuales en el sector”.
“Hacemos un llamamiento a la comunidad aceitera a mantener sus actividades normalmente; la realidad nacional nos impone la necesidad de seguir trabajando día a día,” expresó Gustavo Idígoras, presidente de CIARA. “Se insta a los gremios aceiteros a aceptar la propuesta de CIARA que garantiza que ningún trabajador pierda derechos ni salario. Cerremos ahora las paritarias y permitamos a toda la comunidad aceitera tener asegurado sus salarios hasta agosto del 2021 sin sobresaltos”, agregó.