Aunque las perspectivas para la campaña gruesa 2018/19 son mejores en relación al ciclo anterior, que terminó con importantes pérdidas por la sequía, en el sector hay incertidumbre por el cambio de reglas en retenciones y el valor del dólar.
Según explicó el director de Informaciones y Estudios Económicos de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), Julio Calzada, los productores de la zona núcleo están postergando las liquidaciones.
“Al día de hoy, hay muchos productores con mercadería que están prefiriendo esperar a ver cómo evoluciona el tipo de cambio para vender“, señaló Calzada en diálogo con Infocampo en el marco del Seminario AcSoja 2018.
A esto se suman los insumos, cuyos precios están atados al dólar e indefinidos.
“Hay incertidumbre en costos”, resumió el directivo, quien remarcó que, de todas maneras, “el productor va a sembrar”.
En ese sentido, confirmó que la “buena campaña de trigo” posibilitará el financiamiento necesario para poder seguir apostando a los cultivos, en un momento en el que Argentina “necesita una buena cosecha”.
Consultado acerca de las proyecciones, Calzada adelantó que la soja podría estar en un área sembrada de 19,5 millones de hectáreas con una producción de entre 50 y 52 millones de toneladas,
En el caso del maíz, destacó que bajó el área sembrada por el retorno de las retenciones, con lo cual estimó que “unas 200 mil hectáreas se trasladarían a soja”. “Con buen clima, estaríamos en 43 millones de toneladas“, calculó.
“Después de las pérdidas de la sequía, los productores agropecuarios apuntan a una revancha con esta campaña, y hay mejor ánimo”, sostuvo.
