Autoridades de la Asociación de Productores de Arándanos de la Mesopotamia Argentina (APAMA) recibieron en Concordia a una comitiva de técnicos del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) para avanzar en la implementación de estrategias fitosanitarias que consoliden a la zona como “oasis productivo Concordia – Salto”.
Los “oasis productivos” son zonas con cuidados y condiciones especiales generados por barreras naturales o bien establecidas con medidas de manejo. Entre las fortalezas del área, se encuentran: la textura arenosa, la profundidad de sus suelos, la abundancia y calidad inmejorable de sus recursos hídricos, que junto con su heliofanía generan condiciones óptimas para la manifestación del potencial genético de las variedades que se cultivan en la zona, generando así un sabor único a la fruta. Asimismo, con estas condiciones, la producción se concentra entre los meses de septiembre a noviembre, que es la ventana comercial óptima para la fruta del hemisferio sur.
En la región de Salto Grande, la entidad que nuclea a los productores busca potenciar ese diferencial instalando a los arándanos de la zona con “marca propia”.
Un primer paso en esa dirección fue la jornada de trabajo que compartieron técnicos especializados del SENASA, tanto de Concordia como de la sede central en Buenos Aires, y autoridades y técnicos de APAMA, en la que intercambiaron perspectivas y necesidades de cara a una planificación que consolide el valor agregado de la producción local.
“Concordia y la región tienen oportunidades únicas en términos de suelo y de clima. Las variedades que aquí producimos son las que más se solicitan en el mundo y el sabor de nuestra fruta es el más requerido, por eso buscamos que la calidad de la producción alcance la excelencia y que esa excelencia sea avalada por los organismos de control nacionales e internacionales”, explicó el presidente de APAMA, Alejandro Pannunzio.
El reconocimiento de la zona como “oasis productivo” implicaría contar con la supervisión técnica de SENASA para corroborar el estatus fitosanitario de la zona, y a su vez ratificar que los controles permanentes que hacen productores y asesores sean los correctos.
“Con este proyecto, nos encaminamos firmemente a ser un actor protagónico en los mercados del mundo, que año a año suman nuevos competidores. Estamos en condiciones de disputar las mejores góndolas de los grandes consumidores, como Estados Unidos, Canadá y Europa, y de competir internacionalmente con un producto que sabemos que es codiciado por su sabor y calidad”, agregó Pannunzio. “Estamos trabajando para cubrir todos los frentes y que nuestra producción sea aprovechada al máximo, creciendo como productores pero también como actor central en las economías regionales”, concluyó el dirigente.
De la jornada de trabajo en Concordia, participaron el tesorero de APAMA, Gabriel Wasserman, el vocal Roberto Varela, y los asesores profesionales Sebastián Arístide, Gonzalo Carlazara y Vanina Almirón. Desde SENASA Buenos Aires, concurrieron los técnicos Paola Fedyszak y Esteban Garavelli, y por la sede Concordia estuvieron Roberto Gimenez, Raúl Chobeta y Carlos Morilla.