El cultivo y exportación de frutas y hortalizas registra un crecimiento anual aproximado a 30 por ciento. Por eso en el Foro Provincial de la Producción Agroalimentaria, el gobierno provincial comenzó a delinear un plan estratégico para este sector, similar al que la vitivinicultura ya tuvo con el PEVI.
Hoy se abren excelentes perspectivas para las frutas secas, porque decayó la producción norteamericana, y hay mejores panoramas para las peras y las cerezas mendocinas. Ambos productos se exportan muy bien a los Estados Unidos y a Europa, pero necesitan ganar un mercado que compra mucho volumen, como México.
La ingeniera agrónoma Mariel Vanín, del Ministerio de Economía de la provincia, explicó al diario Uno de Mendoza que es necesario realizar una reconversión de variedades. Frutales como los duraznos y las ciruelas desecadas, en cambio, tienen excelentes perspectivas en el mercado exterior, pero la producción local sufre de atraso tecnológico y desorganización.
“Integrarse en los agronegocios no es plantar lo que quiero y ver luego qué vendo, implica incorporar gestión de calidad, disminuir costos de transacción y conocer lo que el mercado quiere”, resumió por su parte la ministra de Economía, Laura Montero.
Los temas que se comienzan a definir están relacionados con los puntos principales que surgieron del diagnóstico en el que participaron también los productores.
