Tras conocerse la confirmación de 130 despidos en delegaciones del Servicio Nacional de Sanidad Animal y Vegetal (Senasa), productores y empresarios del sector citrícola manifestaron su preocupación por la decisión del Gobierno Nacional de delegar los controles de HLB a entes fitosanitarios.
“Por un lado, venimos negociando desde principios del año pasado porque el Gobierno quiere que nos hagamos cargo de los controles y la prevención de la plaga del HLB, pero también nos preocupa que haya algún problema por los conflictos que hay en Senasa que nos dificulten las exportaciones”, expresó en declaraciones a la agencia Télam Roberto Sánchez Loria, directivo de la Asociación Citrícola del Noroeste Argentino (Acnoa).
Sánchez Loria aseguró que para realizar los controles “como mínimo se necesitan 500 personas para la región Norte y Tucumán, y es un costo extra que va a impactar en la competitividad de todos los productores”. “Falta ver quién pone la plata y quién la administra”, deslizó.
“No puede ser que los controles sanitarios sean delegados, es algo propio de la autoridad sanitaria del país. ¿Para qué pagamos impuestos si además tenemos que pagar por los propios controles?”, se preguntó el dirigente.
Por su parte, el presidente de la Federación del Citrus de Entre Ríos, Fernando Borgo señaló que “la situación con el Senasa es compleja”.
“El Gobierno intenta deslindarse de costos y para eso varios de los plantes van a pasar a ser manejados por entes con importante participación nuestra, pero eso va a ser un costo más”, dijo, al tiempo que recordó que “el HLB entró por fallas en los controles del Estado, no por culpa nuestra”.
Por su parte, empresas como San Miguel o Citrusvil, líderes en exportaciones, también se mostraron con incertidumbre por los paros y conflictos gremiales. “Sin las inspecciones en las plantas empacadoras no podemos exportar”, remarcaron.