Entre el 2002 y el 2003, las ventas de vino argentino a Brasil crecieron, en volumen, 48%, y ese incremento interanual se mantuvo durante el primer semestre de este año, lo que hace pensar que se extenderá a todo el 2004. Este marco, llevó a Brasil a oficializar su preocupación por el ingreso de vinos argentinos de bajo precio.
El viceministro de Industria de Brasil, Marcio Fortes, durante su reciente paso por Buenos Aires puso el tema sobre el tapete, que preocupa a los sectores públicos y privados de ambos nacionales. En este sentido, tanto las cámaras empresarias como algunos funcionarios del Ministerio de Economía bonaerense y el mismo titular del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), Enrique Thomas, estuvieron de acuerdo con que la mejor estrategia es sentar a la mesa de discusión a los sectores privados de ambos países.
Sin embargo, los actores también fueron conscientes de la necesidad de aislar las negociaciones por el vino de las que puedan llevarse a cabo por otros productos, “porque si hay que esperar que primero se resuelvan los conflictos con otros sectores, esto va a llevar tiempo, y en el medio pueden pasar cosas desagradables con el vino”, advirtió Thomas.
De esta manera, va tomando forma el explosivo reclamo que realizó hace más de un mes Antonio Salton, vicepresidente de la Unión Brasileña de Vitivinicultura (Uvibra). “La Argentina hizo la guerra de las heladeras y nosotros vamos a hacer la guerra del vino”, dijo el dirigente en ese momento.
Al parecer, el mayor tema de conflicto pasa específicamente por los vinos de entre 3 y 4 reales (puestos en góndola), un segmento en el que la Argentina es muy competitiva a nivel mundial y ha superado durante el 2002 a Chile en venta de vinos a Brasil, lo que muestra a las claras el potencial que ese mercado representa para los productos locales.
Aunque nadie ha hablado de cupos en las últimas semanas el tema vuelve a sobrevolar la industria vitivinícola argentina.
Si bien los tiempos son escasos, el secretario de Industria, Alberto Dumont, viajará la próxima semana a Manaos (Brasil) para retomar las discusiones pendientes en el marco del Mercosur, entre las que se encontrará el vino.