Los fabricantes de biodiésel volcados al mercado interno reconocieron que tras la implementación del “dólar soja”, la provisión de este biocombustible para el corte con gasoil se redujo en un 35%.
Tal como adelantó Infocampo, el sector pyme reconoció que se dificultó la compra de materia prima para elaborar biodiésel. Antes de la medida oficial para impulsar la venta de poroto, compraban la tonelada de aceite crudo a $140.000 la tonelada, pero ahora les piden $198.000.
Ante este nuevo escenario, los fabricantes dejaron de comprar aceite de soja y se manejan con stocks limitados, situación que afectó el volumen de entrega a las petroleras, para usar en el corte de gasoil.
El anuncio oficial para estimular el ingreso de divisas marcó un antes y un después para la actividad. “Por el momento, estamos trabajando con el aceite que pudimos comprar antes de que empiecen los rumores del dólar soja”, reconoció a este medio un empresario del sector.
“Por el momento, estamos trabajando con el aceite que pudimos comprar antes de que empiecen los rumores del dólar soja”
En este contexto, las únicas operaciones que las fábricas llevan a cabo en estos días son aquellas en donde se fijaron precios con anterioridad al anuncio.
EL NUEVO PRECIO NO ALCANZA PARA LOS FABRICANTES
Si bien la Secretaría de Energía actualizó en septiembre el precio de la tonelada de biodiésel para el mercado interno, que pasó de $198.143 a $220.000 por tonelada, el tipo de cambio de $200 para la soja alteró el negocio.
“Trabajamos a un 40% de nuestra capacidad instalada, por la falta de materia prima”, reconoció la fuente. El primer impacto de este faltante es que en septiembre no se cumplirá el 7,5% del corte obligatorio de biodiésel con gasoil.
Según calcularon los fabricantes, de 70.000 toneladas que debían entregar para el abastecimiento de corte de 7,5%, solo llegaron 25.000 toneladas a las petroleras.