Los grandes jugadores del negocio de insumos agrícolas sellan alianzas para avanzar en nuevos desarrollos tecnológicos.
En un escenario global que demanda cada vez más sustentabilidad en todos las etapas que comprenden desde el lote a la mesa, las investigaciones apuntan a poder combinar de manera efectiva la paleta de soluciones químicas con biológicos.
Un claro ejemplo de esta tendencia es Novonesis, una compañía danesa creada recientemente a partir de la fusión entre Novozymes y Chr. Hansen.
La flamante empresa cuenta con una planta en la localidad bonaerense de Pilar, oficinas en la ciudad de Buenos Aires y cerró una alianza estratégica con UPL para la distribución de sus productos agrícolas
Según informaron desde la firma, la operación se completó con éxito a comienzos de 2024 y en Expoagro pasaron la prueba de fuego que significó presentarse ante los exigentes productores argentinos.
Un dato a tener en cuenta es que la firma danesa incluye marcas reconocidas para el agro local, como el caso de los inoculantes Nitragin. De esta manera, a su oferta de inoculantes se sumarán nuevas biosoluciones, enfocadas a incrementar la productividad pero sin perder de vista la sustentabilidad.
EL APORTE DE LOS MICROORGANISMOS
Gisela Santella, de Investigación y Desarrollo de Novonesis, explicó algunas de las principales líneas de trabajo de la firma.
“Estamos enfocados en brindar soluciones biológicas que se puedan complementar y trabajamos mucho en el desarrollo desde la formulación de la unión de distintos microorganismos”, detalló en diálogo con Infocampo.
En este sentido, explicó que en Expoagro presentaron una formulación que mezcla bradyrhizobium y azospirillum.
“Esta combinación se viene trabajando en Brasil desde hace años con muy buenos resultados, pero no existen soluciones que unifiquen estos dos microorganismos en una misma solución, logramos tener un producto que los combine y permita un tratamiento anticipado”, detalló.
La profesional hizo hincapié que el incremento en el desarrollo radicular de los cultivos se traduce en un mayor aporte de materia orgánica, que en largo plazo permitirá mejorar la estructura del suelo.
RESULTADOS A CAMPO
La dupla bradyrhizobium-azospirillum mostró muy buenos resultados a campo, con mejoras en los rindes que oscilaron entre un 6% y 8%.
“En los biológicos hay que tener en cuenta que son microorganismos y los microorganismos interactúan con ambiente y planta; entonces hay situaciones puntuales en donde el cultivo manifiesta una determinada necesidad y ahí los resultados mejoran y se potencian”, señaló.
Y agregó: “Los biológicos son como una caja de herramientas donde te van a brindar un montón de soluciones que potencialmente están ahí y se ponen en juego cuando el cultivo lo necesita”.
Consultada por los beneficios de usar productos biológicos, Santella puntualizó que además de “ser amigables con el ambiente, dan muy buenos resultados y el desafío desde los laboratorios es acompañar esta oportunidad desarrollando productos de calidad, no es simplemente sumar tecnologías”.