Un decreto firmado por el presidente, Alberto Fernández; el jefe de Gabinete, Juan Manzur; y el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Cabandié; declaró la emergencia ígnea a nivel nacional, debido a los numerosos focos de incendios que se detectan en diversas zonas de la Argentina.
“Declárase la Emergencia Ígnea en todo el territorio de la República Argentina por el plazo de un año a partir de la entrada en vigencia del presente decreto, con el fin de adoptar las medidas que resulten necesarias para propiciar y atender con carácter inminente la presupresión y combate de incendios, la restauración de las zonas afectadas y la prevención de nuevos focos”, señala el texto normativo que se publicó este miércoles en el Boletín Oficial.
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Precisamente, este decreto es la ratificación de la declaración de emergencia ígnea por 12 meses que realizaron el 28 de diciembre pasado el Consejo Federal de Medio Ambiente (Cofema), junto con el Ministerio de Ambiente, en función del riesgo extremo de incendios de bosques y pastizales.
El decreto, en este marco, encomienda a la cartera que conduce Cabandié a convocar a un grupo de trabajo en el que se coordinen la adopción de las medidas y acciones que resulten necesarias para atender la emergencia.
También instruye a Manzur a que reestructure, modifique o reasigne partidas, “con el fin de fortalecer de inmediato la capacidad estatal de respuesta”.
Fundamentos de la emergencia por incendios
En los considerandos del decreto, el Gobierno afirma que “la creciente cantidad de focos de incendios forestales, rurales, de pastizales y de interfase constituye un preocupante fenómeno multicausal que demanda la adopción de medidas inmediatas, a través de la máxima coordinación y cooperación entre los organismos a quienes esta temática resulta transversal”.
También sostiene que “en los últimos meses estos incendios masivos y reiterados en distintas zonas críticas han adquirido una dimensión alarmante y representan una grave amenaza tanto para el ambiente y sus ecosistemas así como para el patrimonio, la salud y la vida de las personas”.
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Para la Casa Rosada, estos siniestros ocurren como consecuencia de actividades antrópicas que se ven agravadas por el cambio climático. Y el resultado es que diferentes ecorregiones del país han sufrido “nocivas consecuencias sobre bosques nativos e implantados, áreas naturales protegidas, zonas agrícolas, praderas, pastizales, matorrales y humedales”.
Más recursos
La declaración de la emergencia ígnea a nivel nacional también posibilita, según los fundamentos del decreto, que el Estado nacional refuerce las acciones que se vienen desplegando a través del Sistema Federal de Manejo del Fuego.
“A pesar de los importantes esfuerzos locales y nacionales, la gravedad de la situación descripta se ha acrecentado a la par de circunstancias meteorológicas adversas que han resultado desalentadoras al momento de combatir los incendios, lo que ha implicado un incremento de los pasivos ambientales generados y de los bienes y las personas damnificadas”, menciona el texto normativo.
Otra vez incendios intencionales. ¿Cómo puede ser este grado de irresponsabilidad? Estamos ante una ola de calor que afecta a gran parte del país y aumenta la peligrosidad de los incendios. Estas acciones no pueden quedar impunes. Necesitamos que la justicia actúe. https://t.co/xhculRGKCq
— Juan Cabandié (@juancabandie) January 11, 2022
Por eso, “en virtud del riesgo de superación de la capacidad de respuesta de los medios empeñados en el combate del fuego, la criticidad de la situación y el peligro inminente de una catástrofe ambiental, deviene necesario, imperioso y conveniente proceder a declarar la Emergencia Ígnea en todo el territorio nacional con el fin de adoptar medidas urgentes, convocar con suma premura a los organismos involucrados y a las autoridades provinciales con el objetivo principal de frenar los incendios y comenzar inmediatamente un plan de restauración de las zonas afectadas”, añade el decreto oficial.
