Con un horizonte claro, la empresa nacional Pauny continúa innovando en el mercado de tractores. En esta ocasión llevó a Expoagro una línea totalmente renovada de maquinaria agrícola que reducen las emisiones de dióxido de carbono a partir de un menor uso de combustible.
Demás está decir que la reducción del uso de combustible es una búsqueda constante en el mercado de máquinas agrícolas, si se tiene en cuenta el costo que le genera al productor el abastecimiento de gasoil.
Infocampo estuvo presente en el stand de Pauny y conversó con José María López, vicepresidente de Pauny quien explicó que “tenemos una variedad muy grande de tractores que van desde los 80 HP a 380 HP, y eso es importante a la hora de ofrecerle soluciones al productor. Que consiga lo que necesite”.
En detalle, el tractor Bravo 780i de 380hp está equipado con motores Cummins QSL, el cual cumple con la normativa de Tier 3 y Etapa IIIA. El mismo combina una tecnología de combustión interna de avanzada y un sistema de combustible de conducto común a alta presión (HPCR) que incrementa la potencia y reduce las emisiones. Es ideal para el trabajo en la agricultura.
La incorporación del sistema Power Beyond le permite al tractor poder compatibilizarse con los más recientes sistemas de dosificación variable de precisión, inclusive para aquellos dosificadores con independencia de control de dosis. Logrando de este modo un tractor que le permite al usuario final poder aprovechar y optimizar las ventajas ofrecidas por las nuevas tecnologías de siembra de precisión.
Sobre las expectativas para el mercado local, López dijo que “soy optimista. El año pasado estábamos en una situación complicada porque la cosecha fue regular y hoy tenemos todo lo contrario. En 2018 caímos un 30% en producción y ventas, y yo creo que este año vamos a recuperar. Quizás lo que sí falta es la pata financiera”.
Consultado sobre si las elecciones pueden influir en el mercado de maquinaria agrícola, López aseguró que “es verdad que el año electoral influye, pero Expoagro es el termómetro de lo que va a pasar el resto del año y se nota optimismo en la gente de campo. El productor, lloviendo y teniendo granos, es feliz e invierte. No están en los bonos, las lebacs y todas esas cosas en las que está otro tipo de gente”.