“Venía muy prolijo todo a comienzos de año. Las relaciones precio-insumos era para que la lechería transitara un 2014 calmo y crecimiento. La devaluación tiró el tablero al diablo y obliga a una actualización de precios”, explicó Sammartino a Entre el Campo y la Ciudad.
En el sector se da la dicotomía de un mercado interno con precios pisados por el programa del gobierno “Precios Cuidados”, y un mercado externo que demanda más y a mayores valores: “Las industrias exportadoras pueden pagar precios altos y ganar plata, a 3 pesos por litro, mientras que las de mercado interno no pueden pagar 2,7 y pierden”, afirmó Sammartino.
Para el especialista, el litro de leche cruda pronto alcanzará los 2,8 pesos, empujado por el valor de la soja, que es un precio de referencia: “La soja está rondando los 2800 pesos la tonelada. Un kilo de soja vale 2,8 pesos, eso es lo que debería valer un litro de leche, su referencia”.
Por último, cerró: “La buena noticia es que en 2001 con la devaluación tardó un año en acomodarse. Para marzo o abril de este año, el piso estará a 2,8. La lechería tiene una capacidad de reacción mucho mayor ante una devaluación”.