Ovobrand es una empresa dedicada a la producción de huevos y ovoproductos ubicada justamente en la localidad que le da nombre, Brandsen, provincia de Buenos Aires.
La firma fue fundada en 2008 por un grupo de inversores nacionales que buscan convertirse en uno de los jugadores más fuertes en el país en industrialización de huevo. Para lograr su objetivo idearon un proyecto a mediano plazo en el que la producción esté absolutamente integrada. Así es que Ovobrand cuenta con todos los procesos productivos necesarios para obtener los productos finales en un predio de 1.300 hectáreas en donde cuenta con la última tecnología.
El proceso de integración abarca desde la producción de granos, la planta de alimento balanceado, granjas de crianza de los pollitos BB, galpones de postura de huevos, transporte automático de huevos, centro de transferencia, planta de clasificación, hasta la planta de procesamiento de huevos.
Su planta de alimento balanceado posee una capacidad de elaboración de 36 toneladas por hora, y abastece en su totalidad a la empresa.
El proyecto final prevé contar con nueve galpones de cría, cada uno con capacidad de albergar a 130.000 pollitos BB. La siguiente etapa está constituida por 28 galpones de postura de huevos, con capacidad para 128.000 aves.
La cadena continúa con una planta clasificadora de huevos, y por último con la planta de industrialización, en donde se obtienen los siguientes productos: huevo entero, yema estándar, yema termoestable, albúmina estándar, albúmina desglucosada, albúmina alto gel, albúmina alto poder de batido y mezclas pedidas especialmente por los clientes.
Es importante remarcar que esta planta de producción será una de las más modernas del mundo junto con una ubicada en Ucrania y otra en los Estados Unidos.
El objetivo final es alcanzar una producción de 180 toneladas de huevo en polvo. En la Argentina, las firmas más fuertes en este negocio son Ovoprot y Tecnovo.
En este contexto, Ovobrand ubica el fuerte de su negocio en la exportación y sólo una pequeña parte para el mercado interno.
Así es que envía sus productos a destinos de la Unión Europea, Latinoamérica y Asia.
Desde sus comienzos, la empresa recibió el visto bueno del actual gobierno provincial. Incluso el gobernador de la provincia, Daniel Scioli, recorrió las instalaciones de la empresa y destacó la fuerte inversión y la modernidad de la planta procesadora.
En este contexto, la empresa recibió créditos tanto del Bice como del Banco Nación para llevar adelante este emprendimiento.
Así es que según el Banco Central de la República Argentina, a enero de 2011 los créditos tomados por la firma ascendían a $36,7 millones. El 36% con el Bice, el 28% con el Nación, el 23% con el Banco Patagonia y el resto se divide entre el Santander Río, Galicia y Supervielle.
Todos los créditos se encuentran en situación uno (normal), sin atrasos en los pagos.
Por otro lado, los socios fundadores de la compañía, según se desprende de sus actas, son Ángel Belisario Di Benedetto, Gustavo Waldbott Von Bassenheim y Backfin SA.
Sin lugar a dudas, esta firma es un claro ejemplo del agregado de valor e integración en nuestro país. Incluso fue tomada como ejemplo en discursos oficiales.
Si bien opera en el negocio hace muy poco, desde el sector señalan que esta apuesta será una de las líderes nacionales en exportación de ovoproductos en el mediano plazo.
