La primera subasta de febrero de la neozelandesa Fonterra arrojó una baja del 10,4% en el precio de la leche en polvo entera, que cotizó a U$S 2.188 por tonelada.
En tanto, el precio promedio de los lácteos retrocedió 7,4% con respecto a la subasta anterior, ubicándose en U$S 2.276 por tonelada. La caída se dio ante un aumento del 11,6% en la oferta.
De este modo, los valores de Fonterra, de referencia en el comercio internacional del sector, se ubican un 7% por debajo de la última subasta de 2015.
En este escenario, todos los productos registraron pérdidas. A la caída de la leche en polvo entera, se suman las de la manteca (-8,3%); el suero de manteca en polvo (-6,7%); la grasa butírica anhidra (-6,6%); el queso cheddar (-4,2%); la caseína renina (-3,7%); la lactosa (-2,6%); y la leche en polvo descremada (-2,2%).
Horizonte difícil
Y mientras en la Argentina se busca que el acuerdo lácteo alcance para superar la crisis sectorial hasta que el comercio internacional mejore, las noticias sobre el devenir de los precios tampoco son alentadoras.
Los contratos a futuro de la leche en polvo entera se ubicaron entre U$S/tn 2.034 (-8,5%) en marzo y U$S/tn 1998 (-13%) en julio próximo.
A su vez, los futuros de la leche en polvo descremada fueron desde los U$S/tn 1.751 (-1%) en marzo, a los U$S/tn 1.807 (-9,3%) en agosto.