Rani es una vaca que nació en pleno confinamiento por el coronavirus en Bangladesh y a sus 23 meses ya se convirtió en la atracción que todo el mundo quiere conocer: mide solamente 51 centímetros de altura y es el animal de su especie más pequeño del mundo.
Las redes sociales se llenaron de imágenes que muestran la anatomía de este ejemplar, que se volvió viral en internet. Además, esto hizo que se generara una ola turística en el país.
Su dueño, Hasan Howlader asegura que la vaca mide solamente 66 centímetros de largo y pesa 26 gramos, con lo cual es 10 centímetros más baja que el animal de su misma especie descrito en los libros Guinness.
“La gente viene desde muy lejos a pesar del confinamiento: ya son más de 15.000 personas que vinieron a conocerla”, dijo Howlader, y añadió que la organización de los récords mundiales le prometió expedirse sobre el tema en tres meses.
La vaca pertenece a un especie cuya carne es muy apreciada en Bangladesh, aunque duplican el tamaño de Rani.
Según el veterinario del gobierno, Sajedul Islam, la altura de este animal se debe a la consanguinidad y es poco probable que crezca más.