Miguens expuso que “estamos preocupados porque nos parece que a veces algunas alzas que se toman con determinados precios no son concordantes con los acuerdos fijados para mantener o rebajar los precios”.
En este sentido, consideró que el aumento en la alícuota de este combustible es totalmente inoportuno ya que los productores están en el pico de la cosecha gruesa, con todo lo que esto implica en materia del trabajo de máquinas cosechadoras, del transporte de los granos a su almacenaje o hacia los puertos.
Miguens negó rotundamente la posibilidad de que, tal como el gobierno lo anunciara, el aumento no conduzca a un incremento en el precio del gasoil.
“Esto va a incidir. Se dice que no se va a trasladar el aumento al precio pero se sabe que estas cosas a corto o mediano plazo se vuelcan a los precios”, sentenció.
Por otro lado, consideró que este aumento requerido por el gremio de los transportistas podría haber esperado unos meses, ya que justamente se están alcanzando algunos acuerdos de precios dentro del sector agroalimentario, para retener los valores y que no impacten en la canasta familiar, y el incremento del combustible indudablemente encarecerá los costos.
“Sabemos que nuestro sector es el principal proveedor de dichos alimentos y de productos que hacen a la canasta familiar”, señaló Miguens, para agregar que el sector agroalimentario está realizando un esfuerzo significativo a fines de realizar este tipo de acuerdos que buscan promover el consumo interno.
El presidente de la SRA explicó que los acuerdos que establece el sector tienen la particularidad de no realizarse a través del productor ya que, en el caso de este conjunto, este actor no es formador de precios.
El campo sigue transfiriendo fondos a otros sectores
Miguens subrayó que el campo sigue pagando retenciones a las exportaciones, mientras que la presión impositiva se mantiene alta y el precio del gasoil también incide en su castigada economía. Así, señaló que los que más sufren este tipo de medidas son los productores más alejados de los centros comerciales, generalmente zonas marginales, de menor productividad que necesitarían mejores precios.
Si bien tanto Diputados como Senadores declararon que la implicancia de la suba del impuesto en el precio del combustible será neutra porque se reduce la base de imposibilidad (el impuesto se aplicará sobre un porcentaje del precio menor al anterior), Miguens consideró que “si bien no incide de manera inmediata un aumento de cualquier tipo de alícuota en el combustible, a la larga se traslada al precio de nuestros productos, de eso no hay ninguna duda”.
Un plan ganadero que nuca llegó
En declaraciones realizadas esta semana, el secretario de Agricultura, Miguel Campos, le dijo a Infocampo radio que el esperado plan ganadero no se lanzaría en forma integral sino que implementarían medidas paulatinas.
Al respecto, Miguens remarcó “la necesidad de un plan ganadero integral para estimular la actividad”, y agregó que la ganadería quedó relegada frente a la mayor rentabilidad agrícola.
“Ahora nos encontramos realmente frente a un problema”, señaló y explicó que si el plan ganadero hubiera salido hace un año, cuando el sector trabajó en conjunto con la Secretaría para su implementación, cuando se alcanzaron acuerdos importantes sobre las medidas a tomar para incrementar la capacidad productiva del ganadero, mejorar su receptividad forrajera, no liquidar vientres, mantener sus stocks y hacer inversiones, las cosas hubieran sido diferentes.
Para Miguens, este atraso en el plan generará que en muy corto plazo, con una demanda interna que crece y la apertura externa de mercados que estaban cerrados para el país por la aftosa, se origine un desfasaje entre la oferta y la demanda.
Así, explicó que en la Argentina “se ha originado una mayor demanda frente a una oferta que, ante la no existencia de proyectos que proyecten a mediano y largo plazo no ha aumentado”.
En este sentido, Miguens advirtió que el país podría toparse “con un cuello de botella que la oferta no podrá atender”, lo que a su vez incidirá en los precios.
Miguens reconoció que el sector está esperando la llegada del ministro de Economía para obtener una audiencia, hasta el momento suspendida. “Creemos que el campo merece obtener la posibilidad de un diálogo, sobre todo en este momento del país creemos que es necesario”.
Asimismo consideró que si bien el tema de las retenciones siempre estará presente en la agenda del agro hoy existen una gran variedad de temas que requieren ser conversados “para no frenar el país, atendiendo a esta necesidad social como es la inflación, que sabemos lo que implica en la Argentina”.
Verónica Scornik
vscornik@infocampo.com.ar
