“No estoy en contra de la cuestión de cobrar regalías, pero sin dudas no estoy de acuerdo con el método, porque todas las empresas que producen autógamas, como cualquier semillero, se encontraría en la situación de plantear un sistema similar. Justamente por esto no tiene sentido seguir discutiendo sobre este tema. Hay que mirar para adelante, preguntarnos qué pretendemos como país, si pretendemos un país serio en el que se paguen regalías a través de la compra de de la semilla fiscalizada”.