El Senado de la Nación aprobó esta semana el proyecto de Ley Nacional de Biocombustibles presentado por el representante de la provincia de Río Negro, Luis Falcó.
Falcó explicó que el proyecto “propone una salida a la crisis energética con la incorporación de combustibles renovables de base
agrícola, que protegen el medio ambiente”.
El proyecto promueve un “corte” (mezclado) obligatorio del gasoil con un 5 por ciento de biodiesel (que se hace con aceite vegetal), y de la nafta con igual porcentaje de etanol (que se produce con maíz o caña).
El proyecto fue aprobado por unanimidad, con el voto favorable de los 42 senadores que se encontraban presentes en el recinto. Ahora pasa para su revisión a la Cámara de Diputados, donde sería tratado durante la semana próxima, según manifestaron varios diputados que impulsan el proyecto.
“Al tratarse de materias primas básicas con que la Argentina cuenta en abundancia, se crearán fuentes de trabajo en el interior del país, además de tratarse de combustibles renovables que tienen menor emisión de gases de efecto invernadero”, destacó Falcó.
La iniciativa había sido presentada este año con la firma de 52 senadores que representan a todos los bloques parlamentarios y a la totalidad de las provincias y con el respaldo del vicepresidente Daniel Scioli, quien destacó la importancia del mismo, que buscará darle una salida eficiente a los déficit de energía que podrían existir.