Dentro de las novedades que la firma Massey Ferguson está presentando este año se destacan los tractores MF 6499, para la gama de alta potencia, MF 299, de 150 HP pensado para el productor mediano y el MF 290 RA, un desarrollo específico para los establecimientos de engorde a corral o ganadería intensiva, donde la carga y descarga de alimentos es uno de los usos principales de los tractores.
âEl gran problema de los tractores que trabajan cargando míxers, sacando silo y distribuyendo el forraje es la rotura del embrague, porque ningún tractor estaba diseñado para eso, hasta el MF 290 RAâ, dispara Ricardo Turati, gerente de Marketing/Services de la compañía.
âLa sigla RA viene justamente de âreversión automáticaâ, porque es un tractor que no tiene embrague, sino que tiene lo que se demomina âconvertidor de parâ. Por otra parte ha sido especialmente diseñado para el trabajo en ganaderíaâ, continúa.
-¿Qué ocurre habitualmente con los tractores comunes cuando se los usa como cargadores?
-Por lo menos dos o tres veces por año, según la intensidad del uso, tienen que parar el tractor, partirlo al medio y reparar el embrague. Pero además no sólo se resiente el embrague sino la transmisión en general, porque tengamos en cuenta que hay también un tema de operación. Cuando tenés que pisar el embrague, frenar, colocar marcha adelante, hacer el trabajo, después pisar el embrague, frenar, colocar marcha atrás es engorroso. Y la verdad es que en la práctica, el tractorista no hace esto constantemente. Por eso, cuando tenés una palanquita que cambia la marcha, como en el MF 290 RA, el rendimiento del tractor es mucho mayor.
-¿Qué opina sobre la conversión del tractor en pala?
-Hay de todo, gente que hace las cosas bien, seriamente, con buenos elementos, reforzando la estructura del tractor, y otros que no son tan buenos.
-¿Qué recomendación le haría a alguien que va a hacer esta adaptación?
-Empecemos por decir que quien compra un MF 290 RA lo hace para eso, justamente. La mejor recomendación es que busque un fabricante reconocido, con trayectoria y que no se fije en el precio únicamente, porque (de hacerlo) a veces los efectos sobre la estructura del tractor no fueron dimensionados adecuadamente y después puede haber problemas de construcción de la pala que se transmiten al tractor.
-¿Cuál es el problema que ven como más frecuente?
-Estructurales. Rajaduras que aparecen en un problema de chasis, del block, de transmisión. El tema es que se necesita un chasis para reforzar la estructura del tractor, que no está pensada para eso.
-Sería un “falso chasis”.
-No, porque es parte de la estructura de la pala que ayuda a transmitir uniformemente los esfuerzos sobre toda la estructura del tractor, no solamente sobre el tren delantero.
-Respecto del hidráulico, ¿qué precaución hay que tener?
-La capacidad de la pala y el peso de lo que se carga tiene que ser compatible con la estructura del equipo y con el peso que puede soportar en el tren delantero, porque recordemos que es un tractor, no un cargador frontal. Si fuera esto último estaríamos hablando de otra máquina, de otros valores y de algo que es para uso de la construcción o la industria.
-¿Dónde se fabrica este tractor?
-En la planta que Massey Ferguson tiene en Santa Rosa, Brasil, donde también se fabrican las cosechadoras.
âVamos hacia un mercado normalâ
âDespués de un 2004 en el que se vendieron unos 6.200 tractores y más de 1.500 cosechadoras, el mercado argentino está tendiendo a una normalizaciónâ, opinó Ricardo Turati, directivo de Agco, empresa poseedora de la marca Massey Ferguson. âCalculo que el año va a terminar con un mercado de entre 4.500 y 5.000 tractores, tendiendo más hacia esta última cifra, mientras que en cosechadoras va a estar en torno de las 1.500â, comentó, haciendo referencia obviamente al total del mercado local. En lo que hace a los tractores, Turati opina que se acentúa la tendencia a desarrollar modelos orientados a satisfacer las demandas de nichos específicos.
