El motivo de realizar estos operativos, según indican desde Agroindustria, es con el fin de mejorar los parámetros de trazabilidad que regulan la operatoria del sector industrial de los granos y las legumbres, como así también la de proteger a la población de productos alimenticios que no cuenten con las certificaciones de registración sanitaria necesarias y obligatorias.
Los casos
En General Madariaga, se clausuraron: una planta aceitera y otra de alimentos balanceados. El motivo fue por diferencias entre el stock de planta y de los libros oficiales, falta de facturación de los subproductos, silobolsas no declarados y carecer de habilitaciones del Senasa. Como resultado de ese operativo, se incautaron más de 3.300 toneladas de maíz, soja, trigo y girasol.
Por otro lado, en Nogoyá, Entre Ríos, se procedió de igual forma con una planta de alimentos balanceados que no documentaba ningún movimiento de entrada y salida de mercadería en los libros oficiales y que comercializaba los productos alimenticios sin ninguna habilitación. En ese caso, se suspendió la titularidad de más de 1.350 toneladas de maíz, soja y sorgo.
En Goya, Corrientes, se clausuró una planta procesadora de arroz por operar sin el correspondiente Registro Único de Operadores de la Cadena Agroindustrial (RUCA) y ninguna documentación comercial que respaldara su operatoria, por lo que se retuvieron 3.000 toneladas de arroz cáscara.
En San Miguel de Tucumán, clausuraron un molino de trigo y fraccionador de legumbres porque no cumplía con el Registro Sistémico de Movimientos de Granos y por eso no pudo establecer la trazabilidad de los movimientos de producción, lo que dejó bajo interdicción a 180 toneladas de granos y legumbres.
Siguiendo con las provincias del norte argentino, en Salta se retuvieron más de 8.400 toneladas de maíz y soja en un establecimiento de engorde de ganado bovino y avícola, donde se constató que en los libros oficiales faltaban más de 40.000 toneladas de cereales, por lo que se intimó a regularizar la situación.
En Santo Domingo, Jujuy, clausuraron una planta procesadora y fraccionadora de granos y legumbres que operaba sin matrícula de RUCA y se puso bajo interdicción más de 110 toneladas de maíz, trigo, porotos y lentejas.