Ya lo decía Albert Bandura en su Teoría de Aprendizaje Social que, para aprender, desde niños observamos el mundo que nos rodea e imitamos. Pero, la ciencia da un paso más y, en lugar de copiar a los pares, lo hace con la naturaleza. Así surgen logros como el del INTA y la UTN que, basados en la propiedad antiadherente de los cascarudos, idearon una superficie similar para herramientas de laboreo que aumenta su rendimiento y ahorra energía. Este logro obtuvo una patente internacional.
De acuerdo con Eduardo Favret –especialista en biomimetismo del Instituto de Suelos del INTA Castelar– “los sistemas naturales trabajan con el principio de energía mínima que implica, básicamente, realizar el menor esfuerzo posible para mantenerse durante más tiempo y de un modo eficiente”.
Es así como, gracias a las características topográficas de su superficie cuticular, el cascarudo es capaz de desplazarse sin que el suelo se adhiera a ellos, con el consecuente ahorro de energía. “Nuestro trabajo se basó en trasladar esta premisa a la labranza agrícola, donde la adhesión de tierra a la herramienta tiene un efecto negativo”.
Así, inspirados en la propiedad antiadherente de la epidermis de la cabeza y del tórax de la hembra del bicho toro o cascarudo, los técnicos del Instituto de Suelos y de Ingeniería Rural (IIR) del INTA Castelar junto a la Universidad Tecnológica Nacional modificaron la superficie de una herramienta de laboreo de suelos que ahorra energía y aumenta su rendimiento.
“El rediseño de la púa escarificadora convencional lisa consistió en agregarle cavidades de 2 milímetros de diámetro distribuidas hexagonalmente”, detalló Favret quien, además, aseguró: “Esta modificación aumentó su rendimiento entre un 5 y un 7 % con respecto a la convencional”.
“Además, –continuó el investigador– este ahorro en la fuerza de tracción, a su vez, repercute en la eficiencia energética y, consecuentemente, en el ahorro de combustible y horas de trabajo”.
El diseño biomimético de la superficie de la herramienta agrícola recibió la patente “Modified Surface Topography for an Agricultural Tool” de la Oficina de Patentes y Marcas Registradas del Departamento de Comercio de los Estados Unidos. Este organismo tiene la responsabilidad de promover el progreso de las ciencias y las artes asegurando a los inventores el derecho exclusivo de sus inventos por un tiempo limitado.
Por su parte, Omar Tesouro –responsable del Laboratorio de Terramecánica e Implantación de Cultivos del IIR– explicó que “si bien un ahorro del 5 % parece menor, si se tienen en cuenta los millones de litros de combustible que se gastan en el sector agrícola, esta diferencia pasa a ser considerable”.
“Esto abre un nuevo campo de acción”, advirtió Tesouro quien, además, puntualizó en nuevos desarrollos: “Se puede trasladar estas modificaciones a otras herramientas que trabajen en contacto con el suelo, como las cuchillas labrasurco o surcadores a fin de disminuir la adherencia del suelo y aumentar el rendimiento”.