En otro orden, Malcorra sostuvo que en Argentina hay “algo que la gente no entiende” respecto del Papa Francisco, pues afirmó que “el Papa no es más Bergoglio”, ya que “interviene en el mundo, y tiene una intervención que tiene un sesgo político en el mundo”, según publica Télam.
“Yo creo que tenemos que distanciarnos un poquitito de esa apropiación que tenemos del Papa”, sostuvo la Canciller en una entrevista que publica hoy el diario Clarín.
Consultada acerca de si el Papa “se distancia lo suficiente” de las cuestiones propias de la Argentina, respondió “yo no puedo juzgar eso, porque, aparte, yo no sé cuánto es el Papa y cuánto es gente que se proclama representarlo”.
Sobre cuestiones de género, aseveró que “el presidente (Mauricio Macri) es sensible al tema”, destacó un programa específico que se lanzó para atender las cuestiones de violencia de género, pero remarcó que “hay que seguir alentando que se haga”.
A propósito de una aparente queja que planteó en el comienzo del gobierno, Malcorra apeló a una broma para aclarar que “en realidad, más que hacer un planteo hice una queja formal, porque los fulbitos de Olivos no nos incluyen”.
“Hubo todo tipo de reacciones, empezando por de qué íbamos a jugar, y yo dije que podría hacer de arquera. No me imagino que me vieran con mucha capacidad para hacer otra cosa, como chiste. Así que es una muestra del club de los muchachos que hay en la Quinta de Olivos”, comentó distendida.