En algunos zonas productivas, el maíz ya atrevesó su peor momento y las pérdidas son visibles y lamentables: el daño es total.
Así está sucediendo en algunos zonas productivas de Entre Ríos, en las cuales el cereal aspectaba muy bien durante la primera quincena de diciembre. Entonces, las primeras etapas del cultivo se habían atravesado con buena dotación de humedad y parecía que el piso de rendimiento estaba asegurado.
Sin embargo, el cuadro de situación cambió 180° y, actualmente, la historia es otra.
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Rolf Müller es un reconocido asesor, consultor y administrador de empresas agropecuarias en esa provincia. Salió de recorrida y su definición fue categórica: “Desastroso”. Así se refería a maizales en completo estado de senescencia, totalmente pérdidos, por medio de un video (Ver video).
Además, agrega, como parte del posteo que compartió en redes sociales: “Venía mal y se cocinó”. La ola de calor terminó de sentenciar la condición del cultivo.
El asesor no fue el único lote que recorrió. También pasó por otros con cultivo de aproximadamente un metro de altura, pero dice “zafa bastante bien el grano”. La espiga, visiblemente, por cantidad de filas, muestra que tiene una cantidad bastante menor para un cultivo de alto rendimiento.
No hagan más ventas forward de gruesa.
— Bumper Crop (@BumperCrop1) January 11, 2022
Algunos productores también arriesgaron sus estimaciones y sostienen que las pérdidas de rendimientos en maíz y soja son superiores al 35%. Esa tamaña pérdida, “es lo que se observa en el campo”, dijeron otros.
Otros coincidían con la estimación de pérdidas de 40%-50% y anunciaban que el aumento de precios no compensaría la caída de los rendimientos.
Mirá el video
Una palabra: desastroso!
Todo pérdida. Venía mal y se cocinó! pic.twitter.com/GZbNhsMzjg— Rolf Erwin Muller (@rolferwin) January 12, 2022
