En diálogo con Télam, Zeta admitió que los rigores del clima frío no sólo afectaron a la provincia de Buenos Aires, sino al resto del país, “sobre todo en el norte”, lo que incidió en el deterioro de la mercadería.
“Nunca se habían registrado temperaturas tan bajas; este frío no sólo afecta a las frutas y verduras sembradas a campo abierto, sino también a los invernáculos, que son carpas gigantes de nylon que se arman para cultivar bajo techo”, detalló el titular de la cámara que agrupa a 600 operadores del Mercado Central.
A su criterio, los aumentos en frutas y verduras que, según afirmó oscilan entre 30 y 40 por ciento, “no se deben a maniobras especulativas del sector” productor, aunque advirtió que sí existe ese tipo de manejos en el precio minorista.
“Los supermercados no compran las frutas y verduras en el Mercado Central, sino que lo hacen directamente a los productores del campo; ahí es cuando se producen la remarcación” de precios de parte de los supermercados.
Al describir las verduras más afectadas por las heladas citó al morrón, acelga, espinaca y zapallito y “toda la otra mercadería sembrada a campo libre como papa, cebolla, batata y todo tipo de turbérculo”.
A su criterio, el aumento de precio de frutas y verduras es “coyuntural, momentáneo”, aunque advirtió que “si el mal tiempo sigue así esta situación se va a seguir extendiendo”.
Reiteró que pasado el mal clima los precios de frutas y verduras descenderán y aseguró que “nuestros productos siempren dan revancha en la canasta familiar”.
A manera de consejo a los consumidores, Zeta dijo que deben comprar “en grandes fruterías y verdulerías” que se abastecen en el Mercado Central, que es “el único que resguarda la salud de los consumidores a través de un servicio de bromatología sofisticado”.
Fuente: Télam