Después de varios días con incendios forestales, el gobierno de Córdoba confirmó que ya no quedan focos activos en la provincia, aunque sí hay algunos evacuados y los bomberos continúan en guardia de cenizas.
“Gracias al gran esfuerzo de Bomberos, Defensa Civil, Plan Provincial de Manejo del Fuego y el Ejército se pudo controlar el fuego y durante toda la noche estuvimos en guardia de cenizas, o sea que no hay fuego activo, pero todos estamos aprestos ante la posibilidad de un reinicio de las llamas”, contó el secretario de Gestión de Riesgo Climático y Catástrofes, Claudio Vignetta.
Las zonas custodiadas son Cerro Mogote y Valle de Buena Esperanza, entre Falda del Carmen y el Observatorio de Bosque Alegre. Hasta ayer, ambos lugares concentraron los dos últimos focos que estaban con fuego.
De todas maneras, Vignetta remarcó que está previsto el relevo con personal descansado y el apoyo de aviones hidrantes para enfriar los sitios que pudieran generar nuevos focos.
“Quedan 40 evacuados todavía, hoy cuando esté bien asegurado el sector van a volver a sus hogares porque no han sufrido ningún daño”, cerró.