El compostaje y la biodigestión de los residuos organicos pecuarios o agroindustriales se consolida como una de las alternativas mas prometedoras que tiene el campo argentino para contribuir a la generación de energías limpias, al tiempo que reduce los desechos liberados al ambiente. Sin embargo, esta posibilidad, que también puede considerarse una producción, se encontraba restringida por los aspectos legales de la utilización de los subproductos. A partir de las nuevas reglamentaciones emitidas por ambiente, senasa y Agroindustria, el marco normativo se completa y los aspectos legales dejan de ser un obstáculo.
El 10 de enero de 2019, SENASA y la Secretaría de Control y Monitoreo Ambiental aprobaron el marco normativo para la Producción, Registro y Aplicación de Compost marcando el primer paso hacia la utilización de los productos que se generan al tratar los residuos orgánicos de las producciones agropecuarias y agroindustriales. Este jueves, 24 de enero, la Secretaría de Gobierno de Ambiente y Desarrollo Sustentable, aprobó la normativa técnica para la aplicación agrícola de Digerido proveniente de las plantas de digestión anaeróbica.
Mediante la Resolución 19/2019 Ambiente estableció los aspectos técnicos para la elaboración y la aplicación de los subproductos que se generan en los biodigestores. A su vez, la resolución determina los parámetros de calidad que deben satisfacerse en los digeridos, como así también los requerimientos y las restricciones para la aplicación del mismo.
La normativa esta basada en los trabajos de A dani et al. 2 0 0 4, la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos y Walker M ., Banks C ., H eaven S . and Frederic ks on J entre otros.
En un anexo de veintitrés páginas, ambiente determina, entre otras cosas, los criterios generales y los requisitos mínimos que debe cumplir el digerido, proveniente de plantas de digestión anaeróbica, para asegurar su aplicación agrícola. Además, desde el organismo señalaron que con estas reglamentaciones pretenden “promover la valorización agronómica del digerido debido a su contenido de nutrientes y otras propiedades intrínsecas que lo hacen potencialmente benéfico para suelos y cultivos, protegiendo la salud de las personas, animales y el ambiente”