Investigadores del INTA, del Conicet y de las universidades de Buenos Aires y San Luis utilizaron drones y un escáner láser terrestre para medir diferentes variables estructurales en bosques de la región chaqueña. Ambas tecnologías permitieron hacer mediciones en forma precisa, sistemática y automatizada y los resultados estarán disponible en una biblioteca de acceso libre.
“Estas mediciones son necesarias para la estimación de biomasa, reservas del carbono, calidad del hábitat y biodiversidad, así como para el desarrollo de estudios de dinámica de fuegos, productividad, sucesión ecológica y otros análisis forestales”, amplió Antonella Ferraina, becaria doctoral del Conicet en el Instituto de Clima y Agua del INTA.
Gracias al trabajo de campo, se logró una colección georreferenciada de representaciones 3D de bosques localizados en la región chaqueña. “Este conocimiento contribuye a mejorar nuestro entendimiento de la relación entre la estructura y el funcionamiento de los bosques, el proceso de degradación de los bosques chaqueños, y de los controles físicos y culturales de la acumulación de carbono, entre otros aspectos”, sostuvo Ferraina.
Asimismo, las representaciones 3D de los bosques podrán ser utilizadas para calibrar y validar modelos que permitan estimar atributos estructurales a partir de, por ejemplo, la información provista por la Misión SAOCOM.
En total, se realizaron 195 vuelos con VANTs y 60 sitios relevados con el ELT en las provincias de Santiago del Estero, Chaco, Formosa, La Rioja, San Luis y Catamarca.
Como pasos a futuro, los investigadores se proponen realizar nuevas campañas de medición en bosques de la Patagonia para aportar al desarrollo de la biblioteca estructural de bosques argentinos. “El acceso a la biblioteca será libre de manera de garantizar el máximo aprovechamiento de este proyecto que involucró la articulación de numerosas instituciones públicas”, indicó Ferraina.
¿Cómo se realizó el ensayo?
Los especialistas utilizaron drones, técnicamente llamados Vehículos Aéreos No Tripulados (VANTs), de cuatro alas rotatorias equipados con una cámara RGB que realizaron vuelos planificados y automatizados, en los que se tomaron imágenes de los bosques desde diferentes posiciones.
Por otra parte, con el Escáner Láser Terrestre (ELT) se recopiló información de alta resolución sobre la estructura y distribución de los objetos en el espacio. “Cuando se lo aplica en bosques, describe la disposición de todo elemento presente en dicho espacio, como suelo, pastos, arbustos y árboles”, señaló Ferraina.
Para la investigadora, una de las pocas desventajas del ELT es que no puede “ver” detrás de los objetos. “Por lo tanto, en bosques con alta densidad de biomasa hay oclusión y sólo se pueden registrar los objetos directamente más próximos al escáner”, detalló. Para compensar esta limitante, se realizaron escaneos desde múltiples posiciones a fin de generar una representación tridimensional de la mayoría de los objetos en el espacio.