âAnte una oferta local tan sólida en cuanto a sus pretensiones, la disyuntiva de los compradores fue si convalidar o no la mejora externa. Está claro que el disponible es la posición que más le duele a la demanda por lo que este tipo de ruedas (más aún en viernes), se hace larga. Comprar iba a significar llevar el maíz arriba de $265 y que la soja rompa la barrera de los 520 pesos. El maíz abrió en $265 y terminó cotizando hasta $267 para entrega inmediata. La soja disponible mejoró a $522, según el momento de entrega.
âAl 13 de septiembre las declaraciones juradas de ventas al exterior de trigo volvieron a subir, en un proceso que va llegando a su fin. El registro abierto tiene los días contados. Para trigo viejo treparon de 15.000 toneladas a 7,9 Mt; las de trigo nuevo (a dos meses de la cosecha y con 50% del área implorando por lluvias) sumaron 96.000 toneladas más, totalizando 6,13 M de toneladas. Frente a la agresividad demostrada por los exportadores para registrar, con la consecuente necesidad de cobertura interna que tendrán, debería esperarse un fuerte despliegue de los molinos para captar los lotes de sus zonas de influencia durante la cosecha, antes de que los productores se decidan a guardarla.â
