Hace un tiempo, el secretario de Agricultura, Miguel Campos, le decía a este periodista “¿Cómo que no tenemos política? ¿Y qué te pensás que son las retenciones?”. Eran los idus de marzo y todo transcurría en las megamuestras. La zozobra por la caída en el precio de la soja (que por esos días comenzaba un repunte) había dejado a más de uno con el corazón acelerado. Cinco meses (y varios temas sin resolver) después, el escenario político para el campo se está deslizando, suave, pero firmemente hacia el pesimismo. Ojo, nadie está pensando en bajar los brazos. Pero los empresarios agropecuarios están empezando a levantar temperatura. Desde el martes y hasta el viernes, más de 2.000 de estos líderes se propusieron quebrar la coyuntura y mirar hacia el futuro (ver págs. 11 a 13). Porque tampoco es cuestión. Total el año está perdido. Es más, hasta el 2007 (elecciones legislativas y presidenciales mediante) está perdido. ¿Que no? Haga una prueba sencilla. Llame a su funcionario municipal, provincial o nacional y coméntele que tiene un proyecto que permitiría resolver algunos problemas puntuales. Le apuesto a que la respuesta será un “¿no me lo alcanza después de octubre?”. O sea, en el próximo siglo. Y parece que últimamente el Gobierno también está perdiendo la tranquilidad. Puso retenciones a las exportaciones de los lácteos y los precios en las góndolas siguen lastimando los bolsillos de la gente. El ministro de Economía, Roberto Lavagna, en un gesto que ya se está transformando en una marca en el orillo, volvió a refunfuñar contra el sector. “¿Qué quieren, que eliminemos las retenciones y mantengamos el dólar alto?”. El dólar agrario que, menos las retenciones, ahora cotiza a unos $ 2,45, ya perdió su atractivo posdevaluación, por el alza de los insumos. Así que ya no luce tan alto. Y en este escenario se viene la siembra de la gruesa (soja, maíz, girasol), la gran caja del campo. El balance que por ahora deja la fina no es alentador. Los números no ayudaron al trigo, que bajó un 30% de área, a favor de la soja, que nuevamente deberá traccionar al negocio. ¿Y el maíz? El weather market (mercado climático) le dio una mano y la ecuación no está tan mal. Con eso se están ilusionando, entre otros, los proveedores de fertilizantes que vieron cómo los pedidos del primer semestre no llegaron en la cantidad y calidad de otros años. Así que a rezarle a San Choclo para equilibrar Por cierto, desde las oficinas de Campos se deslizó que Economía estaría trabajando en un proyecto para encontrarle alguna vuelta para ayudarlo al cultivo: ¿retenciones diferenciadas? ¿tomar este pago a cuenta de Ganancias? Estas, y otras opciones, serán debatidas en una comisión que se constituiría con los funcionarios por un lado y Maizar y la Sociedad Rural Argentina por el otro. ¿Llegarán a tiempo para esta campaña?
Daniel Díaz | ddiaz@infocampo.com.ar
