Luego de las importantes tormentas de principios de setiembre, no se registraron lluvias significativas hasta este martes en la zona central del país. Por ello, hasta entonces, la condición regular y mala alcanzaba a un millón de hectáreas de trigo y, así, la estimación de rendimientos sufría recortes, recuerda la Bolsa de Comercio de Rosario.
Pero, a partir del martes, se cumplió el pronóstico de máxima: hubo acumulados de más de 50 milímetros en el centro y sur de Córdoba; el miércoles siguió lloviendo en el centro sur santafesino y terminó sumando entre 30 y 45 milímetros. El resto de Santa Fe, junto al norte de Entre Ríos y Corrientes, recibió de 20 a 30 milímetros.
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De esta forma, los analistas de la Bolsa indican que, marcada por la falta de agua y por oportunos pulsos que aparecen en los momentos justos, la primera estimación de trigo para la campaña triguera 2021/22 muestra una producción de 20,7 millones de toneladas y un rinde nacional de 31,5 quintales por hectárea.
Provincias
El clima ha privilegiado a la provincia de Buenos Aires: comenzó con excelentes condiciones y las lluvias mes a mes afianzaron un escenario de alta productividad. La provincia se perfila para superar un rinde de 37 quintales por hectárea.
En Córdoba, el trigo pasa por un escenario mucho mejor que el del año pasado. Las recientes lluvias distancian a la provincia del desastre productivo que sufrió el año pasado, estimándose ahora una media provincial de 30 quintales por hectárea.
En el caso de Santa Fe hay una gran diferencia entre los rindes estimados del norte y sur. Los departamentos del sur y centro sur de la provincia tienen ahora excelentes posibilidades de alcanzar los 40 quintales, lo que alzaría la marca provincial a 32 quintales.