Las lluvias caídas durante la última semana en gran parte del área agrícola nacional complicaron seriamente el estado hídrico de los campos en Buenos Aires y La Pampa; a la vez, permitieron abastecer de buena humedad a los núcleos girasoleros del norte del país.
Según informó el Panorama Agrícola Semanal (PAS) de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA), el avance intersemanal de siembra fue de 2,7 puntos porcentuales, alcanzando el 34 % de las 1.800.000 hectáreas proyectadas para esta campaña, manteniendo un adelanto en comparación al ciclo previo de 5,1 puntos porcentuales.
De acuerdo al PAS, el 66 % de las 612.000 hectáreas implantadas se encuentran diferenciado hojas bajo una humedad que varía entre adecuada y regular.
En el NEA, la siembra de la oleaginosa finalizó, con la incorporación de los últimos lotes tardíos sobre las localidades de Santa Sylvina, Gancedo, Villa Ángela y Charata. La expansión del girasol en la región, limitada por el crecimiento del cultivo del trigo durante la presente campaña, alcanzó el 17 % luego de sembrase 380.000 hectáreas (Superficie Girasol 2016/17: 325 M has), según el relevamiento del PAS. A la fecha, los lotes tempranos se encuentran diferenciando entre 6 y 8 hojas (V6-V8) bajo una condición de humedad adecuada, mientras que los últimos en ser implantados apenas desarrollan el primer par de hojas.
En tanto, las labores de implantación continúan avanzando sobre el Centro-Norte de Santa Fe y las regiones del centro agrícola. Las labores alcanzaron el 85 % en el Centro-Norte de Santa Fe, donde los excesos hídricos acumulados obligaron a ciertos productores a realizar re-siembras en lotes que registraron pérdidas en el stand de plantas. La presión sanitaria es normal, relevándose presencia de gorgojo y mildiu en lotes que diferencian entre 4 y 6 hojas.
Sobre la provincia de Buenos Aires y La Pampa las precipitaciones acumuladas continúan afectando a los lotes que serían implantados con el cultivo de girasol en las próximas semanas. El área que ocuparía la oleaginosa para el presente ciclo aún presenta gran incertidumbre en las regiones más complicadas por las inundaciones, siendo primordial una evolución climática favorable durante las próximas semanas que mejore la situación hídrica de la región.