De acuerdo a los datos de la Asociación Fábrica Argentina de Tractores (Afat), las empresas multinacionales (John Deere, CNH Industrial y AGCO) vendieron hasta noviembre 3.926 unidades y Pauny hasta mediados de diciembre había colocado 1.700 unidades; a lo que hay que sumar las operaciones del resto de las empresas que fabrican ese tipo de equipos. De esta manera, las proyecciones dimensionan operaciones durante el año por un total aproximado a los 6.000 tractores, según publicó el diario La Voz del Interior.
Significa una caída del 23%, por debajo del promedio nacional de la venta de equipos agrícolas que supera el 30%.
Comparado con 2013, la caída se ubicaría en torno al 23%; por debajo del promedio nacional de comercialización de equipos que registra una retracción superior al 30%.
Analizando el sector de tractores, el 2014 significó un quiebre de la tendencia alcista. En 2013 el mercado había alcanzado las 7.767 unidades, lo que significó un crecimiento del 44% respecto a 2012, cuando se contabilizaron 5.382 unidades (3.578 de las empresas asociadas a Afat y 1.804 de Pauny). En relación con 2011, el mercado había crecido 6,27%.
El mejor año de la última década para la venta de tractores fue 2008, cuando la demanda interna requirió de 8.360 unidades. Desde que existen estadísticas de ventas, el mejor año para los tractores en Argentina fue 1977, con 23.700 unidades.
Motivos y crédito:
Los motivos que explican la baja son conocidos: campaña con menor rentabilidad, incremento de costos, mayor presión impositiva e incertidumbre económica.
En ese marco, la compra a través de los créditos financieros dominó el mercado, tanto las líneas ofrecidas por las entidades públicas (Banco Nación, Banco de Córdoba, Banco Provincia) como las de los privados y el financiamiento directo de fábrica.