La venta de cosechadoras y tractores durante el primer trimestre del año se redujo un 45% y un 57% medida en cantidades según los datos que publicó el Indec este jueves es su relevamiento trimestral sobre la información suministrada por las empresas.
En efecto, mientras en el primer trimestre del año pasado se vendieron 386 cosechadoras en el mismo periodo de 2014 las unidades colocadas se redujeron a 166. De ese total, en tanto las de origen nacional concentraron el 69% de las ventas y las de origen importado el 31%.
Esa participación en el mercado de las cosechadoras de origen extranjero es el más bajo para el trimestre enero a marzo que se registre desde 2002, cuando comenzó a relevarse el sector de la maquinaria agrícola. Y por oposición es el más elevado en la participación de mercado de la maquinaria nacional.
Un dato no menor puede radicar en el precio promedio de las cosechadoras que con la información del Indec elabora El Enfiteuta y que presenta diferenciales del precio entre ambos productos cercano al millón de pesos.
Por caso una cosechadora nacional que en el primer trimestre de 2013 tenía un valor promedio de 1.703.704 de pesos (como se aprecia en el gráfico) pasó a costar este año 1.955.294 pesos, es decir una suba interanual del 43%.
Pero una cosechadora importada que costaba en promedio 2.431.579 de pesos el año pasado hoy tiene un precio que ronda los 3.394.231 pesos, es decir un aumento del 74%. Así es que comprar una cosechadora nacional sale 962.652 pesos menos que una importada.
Para el caso de los tractores la situación es semejante ya que la caída de las vetas registradas entre enero y marzo (-45%) afectó más a los tractores importados (-56%) que a los nacionales (-33%). En el primer trimestre se vendieron 467 tractores argentinos y 351 fabricados en el exterior.
Pero también aquí la diferencia de precios es abultada. Hoy un tractor argentino cuesta en promedio 357 mil pesos menos que el importado, aunque la suba de precios interanual alcanzó ambos. Para el caso de los tractores de fabricación argentina el precio promedio se elevó un 56%, mientras que para los de origen extranjero casi se duplicó al pasar de 465.789 pesos a 903.989 (+94%) pesos interanualmente.
Según publicó EL Enfiteuta, hasta el año 2012 el valor de tractores y cosechadoras se mantuvo relativamente estable con precios que estaban por debajo de los 300 mil pesos para los primeros y por debajo del millón de pesos para las segundas.
Pero a partir de ese año el valor de la maquinaria se disparó notoriamente: los tractores y cosechadoras argentinas aumentaron en promedio un 120% y un 217%, respectivamente. Mientras que la maquinaria importada reflejó una suba en el precio del 139% para las cosechadoras y del 322% para los tractores.
Esas subas de precios puede explicar en parte la caída de las ventas que preocupa a las cámaras empresarias como Cafma cuyo presidente Carlos Castellani manifestó a la ministra de Industria Débora Giorgi al señalar que la industria tenía un 40% de capacidad ociosa por las menores ventas de este año.
Esa baja no se condice con una menor facturación del mismo orden. Para las cosechadoras argentinas la facturación disminuyó un 25% pero las unidades venidas bajaron el doble. En materia de tractores, la situación es la misma un 33% menos de unidades vendidas, pero con una caída de la facturación que fue del 15%.
Para el caso de las importadas, los altos precios de la maquinaria revierten la ecuación. Mientras la venta de tractores cayó un 56% la facturación de esas ventas se elevó un 56%. Se vendió la mitad de las unidades importadas pero la facturación compensó esa merma por la fenomenal suba del precio tras la devaluación.