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La soja sigue descontando toneladas y la pérdida económica ya alcanza a U$S 5.000 millones

La Bolsa de Cereales de Buenos Aires también redujo su previsión de cosecha, en este caso a 38 millones de toneladas: significa una caída de 3 millones en relación a la semana pasada y de 10 millones con respecto al inicio de campaña.

Soja entre regular y mala en Capitán Sarmiento, Buenos Aires (Bolsa de Cereales de Buenos Aires)
infocampo

El clima sigue jugando su partido en la campaña gruesa 2022/23 y en este caso, pegó de lleno -una vez más- en el cultivo de soja.

De acuerdo a la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA), la producción de la oleaginosa caerá a 38 millones de toneladas, unas 3 millones menos en relación a la estimación de la semana pasada y 10 millones por detrás de las proyecciones al inicio de la siembra.

La entidad porteña se sumó así a la Bolsa de Comercio de Rosario, que también redujo su estimación para la soja (lo mismo que para el maíz), aunque incluso con un valor más pesimista, de solo 34 millones de toneladas, la menor cifra en 14 años.

La semana pasada, la Bolsa de Buenos Aires ya había advertido que la siembra de la oleaginosa había cerrado con la menor superficie desde el ciclo 2006/07.

PANORAMA NEGATIVO

“El ajuste se debe a una merma en rindes de las zonas núcleo”, explicó la entidad en su Panorama Agrícola Semanal (PAS).

La falta de humedad junto a las altas temperaturas durante la primera mitad del ciclo del cultivo, mientras las siembras tempranas iniciaban su periodo reproductivo, generaron importantes mermas en los rendimientos.

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Este escenario adverso también alcanzó a la soja de segunda, con resiembras que en la zona centro se extendieron incluso hasta finales de enero.

Esta situación fue más visible en el centro-norte santafesino y centro-este de Entre Ríos, que concentran el 40% de la superficie sembrada, con un recorte en los rindes que oscilará entre el 30% y 40%.

UN MAPA EN LLAMAS

Los técnicos de la bolsa porteña relevaron un mapa pesimista para el cultivo, con heterogeneidad en el crecimiento, menor número de vainas por plantas y resiembras tardías, que afectarán los niveles de rendimiento.

Las pocas buenas noticias para el poroto llegan desde el sur de Córdoba, norte pampeano y oeste de Buenos Aires, en donde esperan rindes cercanos a los promedios históricos de esas regiones. A la fecha, un 31,4% de la superficie sembrada a nivel nacional se encuentra en estadios críticos para definir rindes.

“Dichos cuadros dependen de las condiciones agroclimáticas de las próximas semanas, que de continuar registrando temperaturas medias por encima a los promedios y precipitaciones escasas afectarán nuevamente nuestra estimación nacional de producción“, advirtieron.

Otro dato que preocupa es que un 48% del cultivo presenta una condición entre regular y mala, situación que afecta sobre todo a lotes en el Núcleo norte y centro-este de Entre Ríos.

PÉRDIDAS ECONÓMICAS

Bajo este panorama, la Bolsa porteña agregó un cálculo que indica que, con estas pérdidas, la soja ya aportará U$S 5.000 millones menos que en la campaña pasada por exportaciones.

Se trata de una cifra que aún podría ampliarse si las expectativas productivas continúan empeorando, a la par de que las lluvias siguen sin aparecer.

 

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