“A pesar de haberse registrado precipitaciones sobre las regiones de Buenos Aires, La Pampa, sur de Córdoba y sur de Santa Fe, la siembra del cereal avanzó durante la última semana 11,8 puntos porcentuales a nivel nacional, impulsada principalmente por las buenas condiciones climáticas en el NOA, NEA y norte de Santa Fe. De esta manera, el progreso nacional de siembra alcanzó el 64,7 % de las 5.500.000 hectáreas proyectadas para el presente ciclo, cifra que de concretarse hacia el final de la campaña reflejaría un incremento interanual del 7,8 % (Superficie Trigo 2016/17: 5,1 MHas). En cuanto al crecimiento y desarrollo de los lotes implantados, los mismos continúan transitando etapas desde emergencia hasta macollaje bajo adecuadas condiciones de humedad y sanidad”, indicó la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
Por otra parte, “al presente informe se da por finalizada la siembra de trigo para la región del NOA alcanzando una superficie implantada de 335.000 hectáreas, un 34 % superior en comparación a la campaña previa (Superficie Trigo NOA 2016/17: 250.000 hectáreas), restando sólo la implantación de lotes puntuales sobre el sur de la región”, señala el Panorama Agrícola Semanal.
“La adecuada oferta hídrica que se presentó en Salta y Tucumán durante la ventana óptima de siembra permitió que el cereal recupere área agrícola, siendo también una herramienta productiva para mejorar el control de malezas resistentes e incrementar la participación de cereales en la rotación con oleaginosas. Los lotes tempranos ya comenzaron a desarrollar los primeros macollos con un estado de cultivo que varía de bueno a muy bueno. En paralelo, la siembra se encuentra próxima a finalizar en el NEA con un progreso que habría alcanzado 95 % de la superficie estimada”, detalla el informe.
Sobre la franja central del país, “en las regiones Sur de Córdoba, Núcleo Norte, Núcleo Sur y Centro-Este de Entre Ríos, la siembra avanzó principalmente sobre ambientes con buen piso para permitir el trabajo de las máquinas. A medida que transcurran las semanas, el escurrimiento de los excesos hídricos permitirá progresar con la implantación de trigo en aquellos sectores afectados en mayor medida por la situación climática de los últimos meses. Los resultados de emergencia obtenidos en lotes implantados sobre el comienzo de la campaña son óptimos, con una presión sanitaria baja y buena oferta hídrica para comenzar con las primeras etapas del ciclo fenológico”, asegura el PAS.
En contraposición, “nuevas precipitaciones demoraron nuevamente las labores de siembra en la provincia de Buenos Aires y en el núcleo agrícola de La Pampa. La falta de piso, el estado de los caminos y el exceso de humedad en lotes, son algunos de los factores que continúan promoviendo la reducción del área triguera en el Norte de La Pampa-Oeste de Buenos Aires, donde se habrían incorporado cerca de 155 mil hectáreas con una demora en comparación a la campaña previa de 20 %. En el Centro de Buenos Aires los mayores progresos de siembra se relevaron sobre la región comprendida entre las localidades de 25 de Mayo, Saladillo y Daireaux, aunque los avances presentaron gran heterogeneidad en función del volumen de precipitaciones acumuladas. El área que podría llegar a ocupar el cereal en dicha región aún presenta gran incertidumbre ya que la siembra se podría extender hasta fines de julio y la misma dependerá de la evolución climática de las próximas semanas, la cual podrá mejorar el estado de humedad de los lotes por implantarse”, subrayó la Bolsa.
Y finalizó: “En los núcleos trigueros del sudoeste y sudeste de Buenos Aires el clima detuvo de manera parcial la cosecha de los últimos lotes de soja por falta de piso, provocando una demora en la liberación de lotes para la siembra del cereal, la cual habría alcanzado el 40 % y 35 % respectivamente”.