El gobernador de la provincia, Gildo Insfrán, el lunes estuvo verificando los trabajos que corresponden a la nueva planta de agua potable que ya está en ejecución en la zona norte de la ciudad, obra que una vez habilitada, tendrá una capacidad de producción diaria de casi 150 millones de litros, es decir un 133% más respecto al actual volumen.
Este monumental proyecto es parte del ambicioso Plan Director de Saneamiento Urbano diseñado por las áreas técnicas del Servicio Provincial de Agua Potable (SPAP), el cual de manera global, es decir planta de producción, nueva toma, acueductos y centros de distribución, demandará una inversión superior $ 106 millones.