La Bolsa de Cereales de Córdoba publicó su segunda estimación de producción estival 2021/22 y confirmó que esa provincia fue, entre las mayores productoras de granos del país, la más afectada por los períodos de sequía y las olas de calor que trajo el fenómeno La Niña durante el verano.
Entre los cinco principales cultivos “gruesos” (maíz, soja, sorgo, maní y girasol), en el territorio mediterráneo se terminarán cosechando este año unas 32 millones de toneladas, un 17% o 6,6 millones de toneladas por debajo de las 38,6 millones del ciclo pasado.
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Semejante caída constituye un dato no menor teniendo en cuenta que, históricamente, Córdoba es la segunda mayor productora de granos del país, y en los últimos años se posicionó como la mayor teniendo en cuenta solo los cultivos de verano.
La clave fue una fuerte pérdida en la cantidad de hectáreas sembradas, así como también una caída de los rendimientos promedio, según el siguiente detalle:
MAÍZ
Se implantaron casi 3,2 millones de hectáreas, pero se cosecharon 600.000 menos. Aunque algunas fue porque tuvieron destino forrajero, la principal pérdida fue por razones climáticos: golpe de calor de enero, sequía, episodios de granizo y las heladas tempranas, de fines de marzo.
Los lotes que quedaron en pie, en tanto, rindieron 75,3 quintales por hectárea, un 15% menos que en la campaña anterior.
[Cultivos] 📍Córdoba
Segunda estimación de producción estival 2021/22
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— Bolsa de Cereales de Córdoba (@BCCBA) May 24, 2022
Así, la producción maicera cerraría en 19,8 millones de toneladas, un 16% por debajo de la temporada pasada, cuando fueron 23,7 millones, pero aún 49% por encima del promedio histórico (2007-2021).
SOJA
La siembra fue de 3,9 millones de hectáreas, un 3% por debajo del año pasado y 15% menos que la media provincial. Y a eso hay que restarle un 6%; es decir, unas 300.000 hectáreas, perdidas por eventos climáticos.
Con rindes proyectados en 30,1 quintales, 14% por debajo de la campaña previa, se recolectarían 11 millones de toneladas, una merma del 17% frente a un año atrás y del 13% en relación al promedio histórico.
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“La soja tardía (sembrada después del 15 de noviembre), al igual que ocurrió en maíz, fue afectada por las heladas tempranas, limitando y disminuyendo los rendimientos”, explicó la entidad cordobesa.
MANÍ
La superficie cultivada en la campaña 2021/22 habría alcanzado casi 300.000 hectáreas en la provincia, con un alza interanual del 4%.
Sin embargo, todo ese crecimiento de área se perdió primero por sequía y granizo, y luego por las heladas tempranas que, además, generaron mermas en los rendimientos esperados.
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En concreto, la proyección de rendimiento en caja sucio y húmedo se ubica en 37 quintales por hectárea, 19% menos que en el ciclo pasado, mientras que la caída es superior (32%) si se tiene en cuenta la estimación de 27,6 quintales en caja limpio y seco.
Así, la producción final en grano sería de 615.000 toneladas, un 22% por debajo del ejercicio anterior.
SORGO
Del área sembrada con este cereal (206.600 hectáreas), un 63% correspondería a superficie con destino forrajero más superficie perdida, lo que deja un área cosechable de casi 130.000 hectáreas.
El rendimiento cae 24%, a 44,3 quintales por hectárea; y la producción 18%, a 572.800 toneladas.
“Hasta el momento, el rendimiento estimado sería el menor de las últimas 13 campañas como consecuencia de la sequía, las temperaturas elevadas, la incidencia de pulgón amarillo (Melanaphis sacchari) y las heladas”, resume la Bolsa mediterránea.
GIRASOL
En Córdoba es un cultivo marginal: durante la primera quincena de abril, finalizó la cosecha de las 33.000 hectáreas sembradas, con un rinde promedio de 23,4 quintales, generando una producción de 77.300 toneladas.
Estos valores productivos representan una merma interanual del 8% y 4%, respectivamente.
