El complejo agroexportador cerró el primer semestre del año con todos sus números en rojo, aunque comenzó a registrarse un leve repunte en los números, tanto en ventas de poroto y subproductos, como de uso de la capacidad instalada de la industria.
Esta mejora llegó de la mano de las importaciones de soja, que permitieron a la industria contar con materia prima en un escenario de desplome de la cosecha 2022/23, que apenas superó las 20 millones de toneladas. En la ecuación también sumó el efecto de la última edición del “dólar soja”.
“Gracias a laimportación temporaria de soja proveniente de Paraguay, Brasil y Bolivia, la industria podrá recuperar volumen de molienda”, señalaron desde la entidad.
De acuerdo al Monitor Agroindustrial, elaborado por la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC), en mayo se exportaron 556.000 toneladas de poroto, contra 4.500 del mes previo. Por el lado de la harina, los despachos acumularon 2,1 millones de toneladas, contra 1,7 millones que se enviaron en abril.
👉 Leve recuperación de las #exportaciones de todo el complejo de #soja, #poroto, #aceite y #harina. pic.twitter.com/E9SU2Q1f5p
— Cámara de la Industria Aceitera Argentina (CIARA) (@CamaraAceites) July 4, 2023
EL “VERANITO” DE LA MOLIENDA
En el período analizado, la molienda vivió un fugaz “veranito” y, por primera vez en muchos meses, el polo de crushing rosarino pudo exhibir números favorables. En el quinto mes del año, se procesaron 3,4 millones de toneladas de poroto, versus las 2,8 millones de abril.
Con este volumen de materia prima, el uso de la capacidad instalada creció un 10%, al pasar del 49% al 59%.
Pero las proyecciones para junio no son las mejores y en este punto, advirtieron que la molienda se ubicará en tres millones de toneladas, el menor registro para ese mes en los últimos ocho años. En 2016, la industria cerró el año con 45 millones de toneladas procesadas.
Los números de la industria para el resto del 2023generan una fuerte preocupación en el sector. A partir de la caída en la cosecha de soja, la molienda podría cerrar el año en torno a las 20 millones de toneladas. De confirmarse este escenario, se trataría de la peor cifra de los últimos 13 años.
En la vereda opuesta, el girasol muestra números favorables y entre enero y mayo, esta industria procesó 1,7 millones de toneladas. Este volumen representa un récord histórico para el sector, al superar el registro de 1,6 millones de toneladas del mismo lapso de 2017.